Revisión sistemática sobre la evidencia del efecto de los antidepresivos en la depresión en personas con demencia.
Contexto: la depresión puede ser difícil de reconocer en las personas con demencia, pero existe evidencia de que es común y está asociada con una mayor discapacidad, una peor calidad de vida y una menor esperanza de vida. A muchas personas con demencia se les prescriben antidepresivos para tratar la depresión, pero existe incertidumbre acerca de cuán efectivo es esto.Esta revisión actualiza una versión anterior, publicada por primera vez en 2002.
Fecha de búsqueda: hasta agosto de 2017 para estudios relevantes.
Características del estudio: se encontraron diez estudios con 1592 personas para incluir en la revisión. En promedio, los estudios duraron sólo 12 semanas, aunque un estudio duró nueve meses. Cada uno de ellos utilizó un conjunto de criterios formales para diagnosticar la depresión y la demencia y comparó un antidepresivo contra placebo.
Los estudios más antiguos utilizaron antidepresivos más antiguos (imipramina, clomipramina y moclobemida) y los estudios más recientes utilizaron otros más modernos, como venlafaxina, mirtazapina y los llamados antidepresivos ISRS (sertralina, fluoxetina, citalopram y escitalopram).
Las personas que participaron en los estudios tenían una edad promedio de 75 años y tenían demencia leve o moderada. Con la excepción de dos estudios, fueron tratados como pacientes ambulatorios.
Resultados claves: Se encuentra que hubo poca o ninguna diferencia en las puntuaciones en las escalas de calificación de la depresión entre las personas tratadas con antidepresivos y las que recibieron placebo durante 12 semanas. La evidencia para respaldar este hallazgo fue de alta calidad, lo que sugiere que es poco probable que una mayor investigación encuentre un resultado diferente. Probablemente también hubo poca o ninguna diferencia después de seis a nueve meses de tratamiento. Otra forma de evaluar el efecto de los antidepresivos es contar el número de personas en los grupos de antidepresivos y placebo que muestran una mejoría clínica significativa (respuesta) o que se recuperan de la depresión (remisión). Hubo evidencia de baja calidad sobre el número de personas que mostraron una mejoría clínica significativa y el resultado fue impreciso, por lo que no se puede estar seguros de ningún efecto sobre esta medida. Las personas que tomaron un antidepresivo probablemente tuvieron más probabilidades de recuperarse de la depresión que las que tomaron placebo (antidepresivo: 40%, placebo: 21.7%). Hubo evidencia de calidad moderada para este hallazgo, por lo que es posible que investigaciones adicionales puedan encontrar un resultado diferente.
Se encuentra que los antidepresivos no afectaron el desempeño en actividades de la vida diaria y probablemente tuvieron poco o ningún efecto en un test de función cognitiva (que incluye atención, memoria y lenguaje).
Las personas que toman un antidepresivo probablemente tienen más probabilidades de abandonar el tratamiento y tener al menos un efecto secundario no deseado.