Anton Hysén, último futbolista en salir del armario

Imágenes: Chueca, Ambiente G.

De origen sueco y miembro del equipo “Utsiktens” (4ª División de la Liga Sueca), ha hecho pública el pasado mes de marzo sus preferencias homosexuales para una conocida revista deportiva sueca llamada “Offside”.

Consciente de que sus declaraciones pueden acarrearle muchos problemas en su carrera profesional, Anton, de 20 años, no lo ha querido ocultar por más tiempo y espera que sus desarmarización sirva de ejemplo para otros muchos jugadores que están en su misma situación.

“Soy futbolista y soy gay. Creo que cuando juego al fútbol a nadie le importa si me gustan los chicos o las chicas”. “La gente puede llamarme lo que quiera. Me hará incluso más fuerte psicológicamente”. Éstas han sido algunas declaraciones con las que Anton ha dejado clara su postura sobre su condición sexual y la homosexualidad en el fútbol.

Además, el futbolista ha añadido estar cansado de que ningún jugador haya salido del armario todavía. “Hay muchos más jugadores como yo. Es de locos pensar que no hay homosexuales pero… ¿dónde están?”.

Además de su hermano, unos años atrás, Glenn Hysén (el padre del jugador, ex-jugador del Liverpool) ya rompió una lanza a favor de su hijo, sin que nadie lo supiera. Y lo hizo durante el discurso de apertura de un festival del Orgullo Gay.

Indirectamente Glenn pidió a su público que pensara en lo difícil que podía llegar a ser para un jugador de 16 años decirle a sus compañeros de equipo una breve frase: “Soy gay”.

Tras estas manifestaciones, nadie podía imaginarse que ese jugador de 16 años no era otro más que su propio hijo.

Además de hablar de una forma increíble, también ha posado su lado más sexy en la revista Attitude Active (Publicación británica destinada al público gay) y no, no se ha desnudado, pero un futbolista con pelo en el pecho y en las piernas se ven poco en los campos de fútbol.

Hysén ha hablado de lo valiente que fue su salida del armario. Le ha quitado toda la valentía al hecho. Afirma que lo hizo porque sentía que tenía que hacerlo, que no entiende porque salir del armario debe considerarse una valentía. Lo que para muchos es un acantilado que no se atreven a saltar, para Anton es un camino de rosas.

Algo que en muchos países más abiertos de mente, al menos en teoría, como España, por ejemplo, se nos hace impensable. ¿Cómo? ¿Un jugador de primera o de segunda hablando abiertamente de su homosexualidad? A día de hoy, prácticamente impensable. Mucho mejor tener una chica-bolso.

Anton Hysén, se había convertido para mi en un ejemplo a seguir por muchos deportistas. Ahora, además, se ha convertido en un icono sexual del campo. Más futbolistas así hacen falta, tanto en lo profesional, como en lo personal como en lo visual. Para muestra, el vídeo del making-of de las fotos.

Fuente: Ambiente G.

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