El lector sabrá desde el comienzo quién es el asesino
El Parnaso Perdido es una novela policíaca en la que ya sabemos quién es el asesino: los hermanos gemelos Samper; uno es poeta llamado Eugenio y su hermano es un anarquista que quiere matar a todos los poetas. Después de muchas insistencias de su hermano, Eugenio acepta y secuestran a un poeta, al que envenenan con estramonio. No obstante, Eugenio se arrepiente y duda si acudir a una comisaría para denunciar a su hermano, y a sí mismo como cómplice del asesinato. Sin embargo, por las insistencias de su hermano, perpetran varios asesinatos más.
La intriga surge por saber si la policía descubre al asesino y lo atrapa. Máxime, porque el policía que debe atrapar al asesino serial de poetas no es cualquier policía, se llama Roger de Flor, y es el director adjunto operativo de la Europol. Roger no quería ser policía, no obstante, ha escalado casi todo el escalafón policíaco, merced a que ha atrapado a muchos asesinos seriales. Los ha atrapado urdiendo una red de tramas complejas y surrealistas: unas veces ha escrito una novela, otras veces ha recurrido a programas de radio, de televisión, en una ocasión filmó una película, en otra escribió una obra teatral. Roger nos cuenta cómo atrapa asesinos seriales con los métodos más surrealistas que mente humana puede concebir. En esta ocasión, decide recurrir a un programa de Poesía de la 2 que presenta la poeta Laura Bembo, la “causante” de los secuestros y asesinatos de poetas.
Es una novela policíaca con un toque de humor absurdo (Roger en realidad quería ser comediante, pero no tiene vis cómica; lo paradójico es que le ocurren muchas peripecias desternillantes), con una galería de asesinos seriales muy peregrina: hay un asesino serial de futbolistas, otro de dentistas, uno más de chefs de cocina; un asesino serial de modelos anoréxicas, otra de magos, uno de hombres que se disfrazan de Papá Noel. Además, aparecen muchos personajes delirantes: como los hermanos Samper (uno es poeta, su hermano gemelo es asesino de poetas), Rodrigo Passalacqua, un tartamudo que quiere ser locutor de hipódromo, el Doctor Andreu Grimaldo, un psiquiatra que quiere convertir a los locos en genios…
En definitiva, se trata de una novela policíaca original, diferente, cuyo suspenso va incrementándose conforme avanza la lectura, y que tiene un final muy sorprendente.