De acuerdo a Boeing, pero incluyendo los accidentes de todas las compañías, 13% de los accidentes fatales de aviación ocurren durante el despegue. Uno de los más grandes retos del piloto es, cuando algo malo ocurre durante el despegue, el decidir si continuar o tratar con el problema durante el vuelo, o parar la aeronave.
Información provista por Eurostat indica que el 85% de los accidentes fatales de 2016 estaban conectados al avión en general y que todas la mayoría involucraba algún error del piloto.
La longitud de la pista es necesaria para un cierto peso del avión, bajo ciertas condiciones meteorológicas. Sin embargo, estas regulaciones son útiles solo cuando todo va bien: cuando el motor funciona a toda su capacidad, cuando no hay fallos inesperados, no hay cambios repentinos en el tiempo u otras perturbaciones. Cuando algo va mal, un piloto puede cometer un error evaluando la aceleración del avión y fallar en comprender en que la longitud de la pista es demasiado corta para que la aeronave alcance la velocidad necesaria para el despegue.
Si el motor no funciona debidamemte, si el viento cruzado o trasero es demasiado grande, el aire es demasiado húmedo, la pista está demasiado áspera, resbaladiza o mojada, el piloto se queda solo con su opinión subjetiva tanto el avión alcance la velocidad para despegue o no.
De ahí la idea de crear un dispositivo que objetivamente evalúa la aceleración de la aeronave durante el comienzo y coordinando los datos del acelerómetro con la longitud de la pista, calcularía también la probabilidad de un despegue seguro. El dispositivo también informaría al piloto si el avión no podría proceder a acelerar de manera segura.
Durante los primeros 10 segundos del despegue, calcula si la aeronave alcanzará la velocidad necesaria bajo condiciones actuales. El despegue en total dura 40 segundos, si el dispositivo predice fallo, el piloto está a tiempo de abortar el despegue.
El dispositivo portátil utiliza los parámetros de los acelerómetros del avión y entonces habría que introducir 5 parámetros adicionales:
- Curso magnético de la pista.
- Dirección del viento y su velocidad.
- Longitud aproximada de la pista.
- Velocidad de despegue.
El dispositivo cambia la aceleración en velocidad, la velocidad en distancia y mientras el avión va rodando sobre la pista su localización y la probabilidad del despegue está siendo calculado.
El innovador contador puede ser útil para todas las aeronaves cuando incluso un pequeño cambio de dirección o velocidad del viento u otras condiciones son de crítica importancia.
De accuerdo a sus investigadores, aunque el actual dispositivo autonómico, que ha sido probado en aviones privados, éste mismo puede ser adaptado a todas las aeronaves, incluyendo grandes aviones comerciales.
El sistema puede ser fácilmente instalado en la cabina de pasajeros, como Airbus, Boeing, Embraer y similar. No requeriría ningún sensor adicional, solo un software especial que compararía la velocidad del avión al principio con el perfil definidor de velocidad, guardado en la memoria del ordenador de a bordo. Si el perfil de la velocidad real no coincidiera con la definida, el sistema mandaría una señal de alarma.
Aun en búsqueda de compañías que quieran probar este software en sus vuelos, este sistema incrementaría la seguridad aérea. Numerosos pilotos con miles de horas de vuelo están convencidos que es necesario un sistema que informe de las condiciones de despegue.
Pero por el momento, se busca obtener una patente para el dispositivo. La patente incial se ha inscrito en la Oficina de Patentes de Lituania,
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