Entramos en el 2016 a toda máquina, y para no perder la costumbre, con
decoración nórdica en blanco y negro... Un apartamento con pocos metros, pero con espacios muy luminosos.
Esas ventanas de la cocina son amor del bueno. Es cierto que esta vivienda tiene mucha luz natural (además, el edificio cuenta con una terraza increíble e impresionantes vistas en la azotea), sin embargo, también me enamora el trabajo de iluminación, con tantos puntos extra bien pensados (ya sabéis que la luz puntual es mi auténtica debilidad!).
Decoración sencilla, pero no por eso menos bonitista. Mucho mueble abierto y baldas. Vale, os doy la razón, es menos "limpio", pero a nivel inversión económica, de practicidad (todo a mano y a la vista) y de estética, no tiene competencia.
Un apartamento bien pensado y muy acogedor...¿No estáis de acuerdo?Buen sábado!
Coralia.