Así lo ha afirmado ni más ni menos que el Portavoz oficial de Fatah, Osama al-Qawasmi, reiterando que Israel pretende demoler el Monte del Templo (el lugar más sagrado del judaísmo) por la caída de una roca recientemente en el muro de las lamentaciones.
Esta acusación la vienen usando los dirigentes palestinos desde hace dácadas para provocar alborotos, muchas veces violentos.
Resulta llamativas las críticas a Israel por su reciente ley cuando es mismo ente palestino el que sí reclama un estado de apartheid puramente árabe y musulmán.
Fuente: Fatehorg.ps