“Apestoso tío Muffin”, de Pedro Mañas (ilustraciones de Víctor Rivas)

Para jóvenes lectores a partir de 9 años.

«XV Premio Anaya de Literatura
Infantil y Juvenil, 2018»

“Una historia divertida e irreverente que nos muestra la importancia de superar nuestros miedos, y nos enseña a dejar a un lado los prejuicios y las falsas apariencias.”

«Es una historia que atrapa desde el principio, en la que la construcción de personajes recuerda a Roald Dahl, donde el humor está muy presente y aparecen temas como los miedos, la capacidad por parte del protagonista de hacer de su debilidad su fortaleza y el hecho de juzgar a alguien por sus apariencias (…) Es fácil que el joven lector se sienta identificado, ya que se habla desde un punto de vista muy vital y positivo, y se tratan cuestiones muy profundas de una manera muy sencilla y natural».
Esta es la razón por la qué el jurado concedió a Pedro Mañas el Premio Anaya de Literatura Infantil y Juvenil en 2018.

Cubierta de: ‘Apestoso tío Muffin’

Esta es la historia de Mr. Montgomery Muffin un señor que, sin quererlo, atraía la porquería. Era algo así como un aspirador humano. Por donde pasaba la mugre se pegaba a él como el hierro al imán. ¿Entonces era un guarro?, no que va, era la persona más limpia del mundo. Cada mañana llenaba su anticuada bañera con litros y litros de agua hirviente y burbujeante y quedaba la mar de limpito. Pero cuando volvía a casa después de ocho horas de trabajo y se preparaba para darse el segundo baño del día un terrible y asqueroso olor a pescado podrido le rodeaba. Así que lleva una vida solitaria llena de jabón y aburrimiento.

Emma

¿Aburrimiento?, si aburrimiento hasta que una lluviosa noche llama a la puerta de su casa situada en el número quince de Haddock Road Emma, una niña misteriosa que asegura ser su sobrina. Y si hay algo que le asustara más que la policía y los ladrones eran los niños. Lo que no sabía nuestro querido amigo Muffin es que Emma es una muchacha que dentro de su ingenuidad, tiene el valor y la temeridad de su carácter travieso y que ante todo ayudará al pobre Muffin a solucionar su problema a cualquier precio.

Tío Muffin

Como en toda novela importante en esta también hay un villano, Cooper, que encima es su vecino; y ya que hablo de vecinos en el número quince viven las extravagantes y disparatadas hermanas Fidenburger: Ester «moño» y Ester «gafas». Y nos queda hablar de la heroína: Miss Dunaway. Una mujer normal, afable, inteligente y trabajadora cuyo encanto no recae en su físico. Tampoco es coqueta o maternal ni existe en la historia para aportar sentimentalismo o ternura. Y, aunque Muffin se enamore de ella, tampoco se comporta sencillamente como un trofeo para el protagonista. Por eso, de algún modo, es un personaje normal y excepcional al mismo tiempo.

Es un libro verdaderamente divertido, y como comentó el autor en una entrevista: “En primer lugar, a los lectores, se les invita a que reflexionen sobre la naturaleza del miedo y el modo en el que nos paraliza y nos vuelve casi inútiles para la vida (aunque haga falta un poco de miedo… ¡al menos para sobrevivir!). Así mismo, fluye a lo largo de la novela el tema de la solidaridad y de la justicia, con Cooper como muestra de que los engaños y la manipulación no suelen llegar a buen puerto. Por último, la relación especial entre Muffin y Emma pone de manifiesto lo curativa y refrescante que puede llegar a ser (para ambas partes) la amistad entre un niño y un adulto. Lo mucho que pueden aportarse mutuamente. Y todo esto sin contar con otros valores que los lectores avispados sin duda descubrirán…”

No quiero terminar esta reseña sin hacer mención de las extraordinarias ilustraciones de Víctor Rivas, que creo ha sabido captar perfectamente el ambiente y caricaturizar a los personajes.

Lee y disfruta de un fragmento de la novela.

El autor:
Pedro Mañas Romero nació en Madrid en 1981. Estudió Filología Inglesa en la Universidad Autónoma de Madrid, donde en 2004 obtuvo el primer premio de Narrativa Corta con el relato Mi pez, mi pez imaginario y yo. También en la Universidad comienza su relación con el teatro, al que ha dedicado casi todo su tiempo, participando en montajes para niños y adultos. En 2006 funda con otros aficionados la compañía La Cama sin Hacer, donde participa como actor y dramaturgo. En 2007 su libro Klaus Nowak, limpiador de alcantarillas recibe el primer premio del XXVI Concurso de Narrativa Infantil Vila d’Ibi, y en 2012 gana el Premio Ciudad de Málaga con Una terrible palabra de nueve letras. En 2015 gana el Premio El Barco de Vapor con la novela La vida secreta de Rebeca Paradise.
Hoy en día, Pedro compagina su labor literaria con encuentros en centros docentes y actividades de promoción de la lectura. De sus obras, los lectores y la crítica han coincidido en destacar el humor, la originalidad y la capacidad para hallar y recrear el lado fantástico de la vida cotidiana.

Pedro Mañas Victor Rivas

El ilustrador:
Víctor Rivas nació en Pontevedra en 1965. Se dedica profesionalmente a la ilustración, dibujo de cómic y comunicación visual desde 1989. Desde hace algunos años trabaja también para otros países a través de una agencia de Nueva York. Se encuentra cómodo en entornos digitales y en cualquier estilo de dibujo, aunque prefiere los mundos fantásticos y la estética victoriana.

El libro:
Apestoso tío Muffin ha sido publicado por la Editorial Anaya en la Colección Premio Anaya. Ilustraciones de Víctor Rivas. Encuadernado en tapa dura sin sobrecubierta, tiene 141 páginas..

Cómpralo a través de este enlace con Casa del Libro.

Como complemento pongo el video resumen del acto de presentación y entrega del XV Premio Anaya de Literatura Infantil y Juvenil a Pedro Mañas por su libro “Apestoso tío Muffin” en el Círculo de Bellas Artes de Madrid. Además del autor, contamos con la presencia de la periodista cultural Cristina Hermoso de Mendoza y de Víctor Rivas, que dibujó en directo y nos mostró el proceso de creación de las ilustraciones del libro.

Para saber más:
http://www.pedromanas.com/bio.html
http://vrilustracion.blogspot.com.es/p/victor-rivas.html

El Premio Anaya de Literatura Infantil y Juvenil se convoca anualmente con la intención de estimular la creación de obras en castellano dirigidas a lectores entre los ocho y los catorce años de edad. Desde 2004, cuando se convocó por primera vez, se premia la originalidad, la calidad literaria y la estética, con el fin de divulgar obras que aviven la afición a la lectura entre los más jóvenes, ayudando a su crecimiento  interior y al desarrollo de la imaginación y de la creatividad.
En ediciones anteriores, este premio ha recaído sobre importantes firmas del panorama literario español, y varios de los libros han sido posteriormente avalados por otros galardones de prestigio como el Premio Nacional de Literatura Infantil y Juvenil (Una habitación en Babel, de Eliacer Cansino y Cielo abajo, de Fernando Marías), el Premio CCEI (La noche más oscura, de Ana Alcolea), el White Ravens (La noche más oscura y Alma y la isla de Mónica Rodríguez), el Premio de la Crítica de Asturias (En un bosque de hoja caduca, de Gonzalo Moure) y el Premio Fundación Cuatrogatos (La voz del árbol, de Vicente Muñoz Puelles y La sonrisa de los peces de piedra, de Rosa Huertas).

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