Las bolsas siguen sometidas al pesimismo que emana de las noticias económicas, que están presididas por la sensación de que la economía mundial no sale de su agujero, la europea no encuentra soluciones y los pigs, entre ellos España son cada vez más “pigs”.
En ese contexto, suenan las trompetas de Apocalipsis. Mi consejo es sentarse a tomar un aperitivo cuando eso sucede, y contrarrestarlas con un poco de salsa o rock&roll (a gustos).
No estamos peor que ayer, y las haciendas públicas y las grandes empresas nos sobrevivirán. Seguro. Eso sí, no es momento de hacer locuras, sino de replegarse a lo seguro, sea en renta fija o variable.