Después de una intensa lluvia en la sierra de Tamazunchale, la Huasteca potosina se llenó de vida y color, recibiendo a las candidatas del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), Ruth González Silva al Senado y Claudia Sheinbaum Pardo a la Presidencia de México. Ambas fueron acogidas cálidamente por las comunidades indígenas tének y náhuatl en una ceremonia llena de simbolismo y esperanza.
Durante el evento, las líderes comunitarias entregaron a Sheinbaum Pardo el bastón de mando, que representa la confianza de los pueblos originarios y el compromiso de apoyarla para convertirla en la primera presidenta de México. Vestida con un tradicional traje blanco bordado por artesanas potosinas, Sheinbaum se comprometió a velar por los intereses de las comunidades indígenas, aumentar los apoyos sociales e impulsar proyectos significativos como la creación de una Universidad de la Salud en la región.
Ruth González Silva destacó su compromiso desde el Senado para asegurar que la administración de Claudia Sheinbaum y el Gobierno del cambio aumenten los apoyos sociales y extiendan sus beneficios a todas las familias de los pueblos originarios de San Luis Potosí, quienes han sido históricamente marginados.
El evento no solo simbolizó un compromiso político, sino también una unión cultural y un reconocimiento a la sabiduría ancestral y las tradiciones de las comunidades indígenas de la Huasteca potosina.