“Aprende, emprende y vuelve a emprender”. El Gobierno regulará la segunda oportunidad de los emprendedores para que aquellos que no han tenido éxito en su primer intento puedan volver a intentarlo.

Imagen: sozpic.com

Nuevamente sabemos algo en pro de aquellos que tengan iniciativas empresariales atascadas en su cabeza y ningún recurso económico para ponerlas en marcha. Hablo de los emprendedores, los únicos que se atreven a tirarse al mar cuando hay fuerte marejada y encima tienen que nadar contracorriente durante toda su existencia empresarial. Pues al parecer el Gobierno creara un fondo de inversión para emprendedores dotado con 40 millones de euros y que estará cofinanciado con el sector privado.

La vicepresidenta del ejecutivo, Soraya Saenz de Santamaría ha afirmado el papel crucial que los emprendedores y las pymes juegan en la vuelta a la creación de empleo y al crecimiento y ha destacado que respaldarles no es un discurso político del Ejecutivo sino “una necesidad objetiva”. Pues ésta buena señora parece que se ha dado cuenta de que los únicos capaces de crear empleo y poner en marcha el motor económico del país son los mismos que no pueden montar un negocio por culpa de los bancos.

Y aunque aún falta por ver cuáles son los requisitos para acceder a ese fondo de inversión para emprendedores sí me gustaría resaltar otra de las importantes iniciativas que tiene pensado desarrollar el Gobierno y que pasa por regular la segunda oportunidad de los emprendedores para que aquellos que no han tenido éxito en su primer intento empresarial por culpa de la coyuntura económica puedan disolver cuanto antes su primera empresa e iniciar un nuevo proyecto.

Porque si hay algo que existe en España es un terrible miedo al fracaso, temor infundado sobre todo por aquellos que prefieren vivir en la mediocridad de sus insulsas vidas y que por ello no dejan que los que tienen espíritu aventurero y empresarial den un paso adelante e intenten lograr su sueño. Hace no mucho escuché en una entrevista a un joven emprendedor decir que “fuera de nuestro país si te sale mal un negocio, te animan a que sigas intentándolo mientras que en España solo oyes cosas como: te lo dije o era de esperar”.

Así que si con esta ayuda a las segundas oportunidades también se puede cambiar la mentalidad retrógrada de aquellos que se quedaron en el pasado y no se han actualizado porque eso conlleva desaprender para aprender, estaré enormemente feliz y a los que tengan ideas, que las pongan en marcha porque como dijo Walt Disney: Si se puede soñar, se puede lograr”.

Esta es la crónica habitual, de un día como otro cualquiera…

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