“Esta iniciativa surge de la unión de un grupo de padres y maestros sensibilizados y muy en contacto con el mundo de la educación. Empezamos por consultar a personas, escuelas y organismos sobre cuáles eran, según su opinión, los puntos fundamentales que debían reunir una EDUCACIÓN INTEGRAL DEL SER HUMANO. Con toda esta información sumada a los diferentes movimientos internacionales que igualmente abogan por una educación vinculada a la creatividad, como Ken Robinson; y emociones y auto conocimiento, como Claudio Naranjo, empezamos a elaborar el manifiesto educativo de Aprendemos Todos”
“La neurología y los últimos estudios científicos nos hablan de la plasticidad de nuestro cerebro, del peso de las emociones en nuestra salud, de la necesidad de integrar el cuerpo en los aprendizajes para un perfecto desarrollo neurológico, de la química de nuestras emociones y de la necesidad de llevar todos estos enfoques a la educación, el único sitio desde el cual PODREMOS MEJORAR EL MUNDO”
- Marina Escalona
El mundo sanitario está siendo debatido, cuestionado y tratado de mejorar desde dentro y lo mismo ocurre con el mundo de la educación.
Nuestro modelo educativo actual es heredero del siglo XIX y de las necesidades de la sociedad industrial y jerarquizada de aquella época y ahora en el XXI ese sistema está en coma y se está reformulando de nuevo desde muchos frentes.
Hemos hablado de la nueva pedagogía holística, de escuelas libres, de la secta del profesor rojo, … y ahora se suma una nueva iniciativa que bajo el nombre de APRENDEMOS TODOS (toda una declaración de intenciones no adultocentrista) sugiere la creación de un sistema educativo basado en el desarrollo integral del niño que logre como resultado una persona “conectada consigo mismo y con su entorno”.
Critican que la mayoría de los sistemas educativos del mundo ponen el peso en la formación intelectual, dejando de lado las emociones, el cuerpo y el espíritu y apuestan por la figura del profesor como ‘maestro de humanidad’ que posibilite el desarrollo de toda la riqueza, talento y creatividad que posean sus alumnos y él sea el verdadero catalizador de ello.
Pero huyen de la cultura de la queja y el inmovilismo y han elaborado un manifiesto con 20 puntos que resumimos a continuación y entre los que destaca la ESCUCHA a los niños, el acompañamiento sereno, la libertad de movimientos, el respeto a sus ritmos y la alegría.
1. Aprendamos a escuchar lo que los niños del mundo nos piden para su educación
2. Honremos nuestro origen, la educación de la que venimos y comencemos a andar hacia el futuro, nuestro tiempo, nuestro destino.
3. Desarrollo holístico
4. Aprendamos a acompañar serena y confiadamente a los niños, en la confianza de todo lo bueno que está por venir.
5. Aprendamos más cerca de la alegría, lo sencillo y lo positivo.
6. Respetemos el tiempo que se necesita para crecer despacio y tranquilo.
7. Demos sentido a lo que hacemos
8. Aprendamos practicando, experimentando, viviendo lo que hacemos. Respetemos la condición natural del niño que es preguntar, tocar, explorar, recrear, jugar y moverse.
9. Aprendamos a gestionar nuestras emociones
10. Fomentemos el pensamiento vivo, la creatividad, la capacidad esencial del ser humano.
11. Aprendamos a cuidar nuestro cuerpo, templo sagrado de lo que somos
12. Aprendamos a reconocer nuestro potencial, aquello que nos distingue de los demás y que ponemos a su servicio
13. Aprendamos del compromiso con la naturaleza
14. Aprendamos a respetar los animales, crezcamos cerca de ellos
15. Aprendamos como adultos a dar ejemplo
16. Hagamos de la escuela un enorme paraguas donde quepamos y participemos todos, padres, madres, maestros, maestras y todo el que quiera un lugar
17. No dejemos a nadie en el camino
18. Aprendamos a ser libres
19. Aprendamos a ser paz
20. Conectemos con nuestra humanidad pues ella nos conecta con todos los seres de la tierra. Conectemos con nuestra energía donde todo es posible. Conectemos con nuestra luz pues en ella iluminamos al mundo. ¡No olvidemos que…! “NUESTRO DESTINO ES SER UNIVERSO”.