Aprendiendo de emociones: Hablemos de la FRUSTRACIÓN
Por Gadirroja
¿Sabes esa sensación de que has luchado muchísimo por algo, te has esforzado y aún así no has conseguido lo que te propusiste?.Se llama frustración y no es agradable. Pero podemos comprenderla y aprender a gestionarla, y también en casos en que no nos sea útil, también podemos cambiar nuestras metas porque quizá está ahí el problema.
Vamos a profundizar.
1. La frustración: no te gusta, pero la necesitas.
Como decía en la entradilla, a nadie le gusta sentir frustración.
Es una emoción compleja que mezcla las primarias de ira (enfado, cabreo, irritación por no conseguir un objetivo) con tristeza (pena y lástima por lo que te has esforzado, el tiempo invertido, etc.).Como siempre digo, ya sabes que las emociones NO son buenas ni malas, son necesarias y en este caso, por poco que nos guste, la frustración es necesaria también: por una parte nos ayuda a hacer el duelo de eso que no hemos conseguido y que tanto queríamos (tristeza) y por otra nos prepara para volver a intentarlo con más ganas...o poner el límite ahí y dejarlo ir porque no es saludable para nosotros (ira).Por otra parte, seguro que has escuchado alguna vez la expresión "baja tolerancia a la frustración". Pero vamos a profundizar ahora mismo en esto.
2. La tolerancia a la frustración se aprende.
Como te decía, a menudo se dice "este niñx tiene baja tolerancia a la frustración" para referirnos a alguien que suele salirse siempre con la suya y justo por eso, cuando llega un momento en que es imposible que gane o que consiga su deseo, puede montar una rabieta terrible porque no sabe cómo gestionarlo.
Y es que, efectivamente, aprendemos a frustrarnos desde la infancia, al no conseguir todos nuestros deseos y esto es lógico y forma parte de nuestra evolución. Las personas con baja tolerancia a la frustración son caprichosas, a menudo muestran una ira desmedida en situaciones que ya deberían saber gestionar de otra manera y además, ellas también sufren por todo lo que sienten.
3.¿Y si mi frustración no es útil? Cambiar el chip.
Pero ojo, lo mismo que a menudo digo que las emociones NO son malas, si pueden ser desadaptativas cuando no te están sirviendo. Si tu(s) meta(s) te provocan continua frustración, a lo mejor lo que debes hacer es REVISARLAS.
Ten en cuenta que vivimos en una cultura en la que parece que todas las personas "debamos " conseguir unos "logros" (pareja, hipoteca, trabajo estable, descendencia....) para ser felices y ESTO NO ES CIERTO. Igual es hora de que revises si esas metas son tuyas de verdad...o son aprendidas.En otras ocasiones puede ser que, por tu trayectoria vital, tus valores hayan cambiado y ya no se correspondan con esas metas y entonces las frustración puede venir incluso una vez las has conseguido. Por eso siempre es importante hacer introspección y evaluar nuestros objetivos y cómo nos sentimos al respecto.
¿Qué te provoca frustración? ¿Alguna vez la has sentido en la línea en que la trato en este post?
Gracias por seguir en este viaje.
Por muchos momentos bonitos