Cuando el espacio escasea en una vivienda, aprovecharlo al máximo es una prioridad, incluso si resulta en un interior poco convencional. Fijaos en la planta de este mini – piso de 35m² por ejemplo, ni un centímetro cuadrado desaprovechado, pero claro, el precio, es que la cocina está ocupando el pasillo :O
La verdad es que más que un “pero”, es todo un acierto, ya que de otra manera se le habría robado espacio a otras habitaciones y no habrían quedado tan holgadas. La decoración es sencilla y ligera, con algún contraste de color que ponen los textiles. ¿Qué os parece? ¡Feliz jueves!
Vía: Mäklarhuset