Pues la apuesta de esta semana es esta cancionaca, con la que todo hijo de vecino puede empatizar via letra, de guitarras afiladas, en la mejor tradicion de los grandes nombres de nuestro indie-rock.
Mi faceta más cobarde se encuentra en su ep homónimo autoproducido, un material cargado de emoción y talento, y aunque ellos digan que está hecho con escasos medios, creo que no influye para nada en el resultado final.
Como siempre intento reivindicar desde aquí, lo importante es el talento.
Podéis escuchar el resto de canciones canciones desde su bandcamp, o descargarlo pinchando aquí.