El Balneario Termas Pallarés evoca un pasado glorioso por la grandeza arquitectónica de sus edificios, el expresivo clasicismo de sus jardines, la calidez del mobiliario… Hoy revivimos el pasado romano de la villa termal de Aquae Bilbilitanae actual Alhama de Aragón, como parte de la historia del Balneario Termas Pallarés.
La antigüedad de Alhama de Aragón, municipio en el que se ubica el Balneario Termas Pallarés, se remonta a la ocupación por íberos y celtas, sin dejar huellas apreciables. Los romanos desarrollaron una auténtica cultura del agua, tanto por los proyectos acometidos como por el relieve que concedieron a las aguas naturales transportadas o utilizadas ya desde el mismo punto de su nacimiento y fueron los que crearon las termas aprovechando las propiedades de esta agua, denominándose Aquae Bilbilitanae, junto a Bílbilis.
Historiadores como Cea Bermúdez, Vicente de la Fuente y Pascual Madoz, reseñan la importancia de Aquae Bilbilitanae como lugar de asentamiento romano debido fundamentalmente a la abundancia de fuentes calientes.
Uno de los restos más significativos de esta época, que se encuentra actualmente en el yacimiento arqueológico de Bílbilis (Calatayud) en su centro de interpretación es el epitafio del Liberto Aquensis. Se trata de una placa de caliza que perteneció a la colección de los padres Mercedarios. Nos permite conocer el cognomen, Samius, que es de origen griego. Parece que el fallecido se traslada a Bílbilis desde su ciudad natal, conocida como Aquae Bilibilitanorum, pequeña localidad termal, a pocos kilómetros de la ciudad.