Como esta semana en España tenemos fiesta nacional el jueves día 6, que mejor manera que festejarlo a lo grande, sin normas, sin límites, lo que se dice hacer una gran fiesta. Con motivo de fiesta y con muchas gamberradas, aquí tenéis una cinta que cuenta con grandes actores cómicos como lo son Will Ferrell, Luke Wilson y Vince Vaughn: Aquellas Juergas Universitarias (Old School).
¿De qué va?
Mitch Martin (Luke Wilson) acaba de llegar a su casa después de un viaje de negocios y se encuentra a su mujer (Juliette Lewis) en plena orgía. Días después de mudarse a su nueva residencia al lado de un campus universitario, uno de sus mejores amigos, Frank Ricard (Will Ferrell) se acaba de casar y otro de sus amigos, Bernard Campell (Vince Vaughn) les propone de montar una fiesta al puro estilo universitario para celebrar la soltería de Mitch. Sin embargo todo se complica cuando el decano (Jeremy Piven), quien era el marginado de clase de la promoción de los otros tres, les da el plazo de una semana para abandonar el local. Aquí es cuando la cosa ya se complica y deciden montar una hermandad con tal de no ser expulsados del recinto.
La crítica
Quien no crea que la sinopsis que acabo de redactar es de locos ya se puede ir, porque esta película es una locura inmensa, no tiene límites ni desperdicio alguno. La principal idea del film es ver cómo esta panda de descerebrados, que ya tienen una familia y sus vidas hechas, se meten de lleno a liarla como nunca en un seguido de fiestas descomunales y gamberradas sin sentido alguno. Sin contar que harán lo posible porque no los expulsen de casa y cese su gran fiesta.
La película es pura diversión desde un comienzo, cuando se nos enseña a Juliette Lewis en plena orgía (no salen desnudos, van todo en túnicas y sale gente hasta de debajo de las piedras) y ya lo que siga es un no parar. No quiero dar más detalles de la escena porque realmente es para verla.A esta escena les siguen muchísimas más. Una con la que más me reí es cuando el trío de maduros cogen una furgoneta negra al estilo Equipo A y van a buscar los futuros miembros de la hermandad, pero no a lo bestia. Por ejemplo, llegan a un banco donde están sentados unos abuelos, cogen a uno en concreto y se lo llevan, como sí nada. No me diréis que vuestro abuelo está en una hermandad universitaria porque no cuela. Aún y así, insisto por eso que vale más una imagen que mil palabras, porque podría redactar la crítica más larga de todas explicando cada escena cómica y no causaría el mismo efecto.
En cuanto a los personajes, los tres protagonistas son espectaculares porque consiguen lo que se pretende: hacerte reír. Además, el personaje protagonista que es Mitch es el que menos me cautivó de los tres porque se reparten muchísimo ese protagonismo. Mi preferido es el de Vaughn porque es el más decidido, alguien totalmente alocado pero que parece estar en su sano juicio. Hay que decir que Vince Vaughn es de esos actores que me tiene engatusado, tiene un algo que hace que te mueras de la risa sí o sí. Tampoco dejo en el olvido al personaje de Will Ferrell, quién no me acaba de hacer como actor pero que, sin embargo, su personaje es de lo más gracioso. No es que tenga una única escena buena, es que tiene muchísimas. De hecho, hay una en concreto que parodian a más no poder la típica escena de Dustin Hoffman en la piscina de la película El Graduado.
Con lo cual, si ya de por sí la trama era de las buenas para conseguir que te rías, sus personajes acaban de dar ese toque que remata lo primero. Contando que sus interpretaciones son exactamente las que precisa el tipo de filme. Y esto tan solo los protagonistas, que cada miembro de la hermandad tiene un toque personal que lo hace característico.
Como error o fallo, porque tampoco es que sea la película perfecta, creo que el hecho de meter indebidamente al personaje de Nicole, interpretado por Ellen Pompeo, está de más. Porque de nuevo (y en muchísimas películas) se intenta meter a presión algo de amor en cintas que realmente está de más. También cabe decir que tampoco se le da una importancia inmensa a ello y no es precisamente de los peores ejemplos que he tenido ocasión de ver.
Con vuestro permiso haré la mención más especial que se haya hecho nunca y preguntaros: ¿Quién no iría a una fiesta con el nombre de Mitch-A-Palooza? Con música en directo y cerveza, en serio: ¿quién?
En definitiva, si lo que quieres es pasar un buen rato de la mano de un puñado de buenos actores, prepárate para troncharte de risa porque realmente Old School es una de las películas con las que más me he reído. Así que, como dudo que alguien no tenga sentido del humor, recomiendo a cualquiera este filme, ¡no os lo podéis perder!
Información de más- El hombre que hace de suegro de Frank Richard, el papel de Will Ferrell, es el contable de este.
- El perro del director del filme, Todd Philips, hace un cameo como instructor de sexo oral canino.
- El rapero Snoop Dogg hace un cameo en la película.
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