Arcachon y la duna de Pilat

“Las dunas cambian con el viento, pero el desierto sigue siendo el mismo” (Paulo Coelho)

Durante nuestra ruta por Francia tuvimos la oportunidad de visitar un paisaje natural impresionante, la duna de Pilat cerca de la localidad de Archachon, a menos de 1 hora de Burdeos y a 200km de San Sebastián. ¿Quieres saber que tiene de especial este lugar?

Si el Monte Saint Michel es el segundo lugar más visitado en Francia después de la ciudad de Paris, la duna de Pilat es el segundo paraje natural más visitado de Francia por detrás del Monte Saint Michel.

Para llegar hasta ella podéis ir hasta la ciudad de Arcachon, desde ahí hay miles de carteles indicando el camino. Eso sí, veréis carteles escritos de miles de maneras: “dune du pilat”, “dune de pilat”, “dune de pyla”, “dune du pyla”, etc… es el mismo lugar, pero cada uno lo llama de una forma diferente. Si preferís desplazaros en tren podéis hacerlo desde Burdeos hasta Arcachon y desde allí coger un autobús que os dejará en la duna.

Este curioso paraje dispone de parking, el precio es de 4€ si estáis 4 horas o menos, o 6 € si queréis pasar el día entero. Tan solo una advertencia y es que está prohibido aparcar allí por la noche (entre las 2 y las 7 de la mañana), si lo hacéis y os pillan os pondrán una multa de 40€.

Una vez aparcado el coche tendréis un paseo de unos 5 minutos hasta llegar a la duna. Por el camino tenéis bares, baños y alguna tienda de souvenirs antes de ver la escalera que os llevara a la cima de la duna. La escalera creo que solo la ponen entre mayo y noviembre.

Si os queréis ahorrar el parking en la rotonda que os lleva a la duna tenéis que elegir la dirección de Arcachon, girar a la izquierda en la siguiente rotonda dirección “La Corniche” y en seguida veréis una zona donde hay aparcamiento gratuito. Para llegar desde allí a la duna tendréis que dirigiros hacia el restaurante y en la curva que hay a la izquierda del mismo veréis una escalera que os lleva directamente a la duna, eso sí, el camino es mucho más largo.

Llegado este momento tenéis dos opciones, la manera fácil es subir por la escalera como la mayoría de las personas, la manera más aventurera es subir directamente por la arena de la duna, para los que opten por esta opción aquí van un par de consejos: subir en diagonal porque recto os va a costar más, y cuidado con la bajada porque es mucho más complicada, vi (literalmente) a niños bajar rodando.

La duna de Pilat mide 2,7 kilómetros de largo, 500 m de ancho y hasta 110 m de alto, aunque tal y como reza la frase elegida para encabezar esta entrada, la duna varía según el tiempo y la meteorología. Aun así, la duna de Pilat es una de las más altas de Europa, pero lo que la hace espectacular no es su altura, sino el entorno que la rodea ya que no está en mitad del desierto como podemos esperar de una duna, sino que a un lado tiene un bosque infinito de pinos y al otro lado el mar. Debido a los fuertes vientos y corrientes marinas cada año la duna se adentra unos cuantos metros en el pinar.

Es un lugar perfecto para hacer parapente y ala delta ya que las condiciones del viento son optimas para estos deportes.

Quizás os interese leer el post general de la ruta por Francia y las ciudades que visitamos. Como siempre, si os ha servido de ayuda la entrada u os ha gustado podéis dejarnos un comentario, o seguirnos en instagram, twitter y facebook para seguir actualizados con las nuevas entradas. ¡Estad atentos a las próximas entradas!