¿ARE YOU READY?
Cuando el buscar trabajo ocupa gran parte de tu rutina diaria, cuando lees cada oferta que te puede interesar y cuando al leerla sientes como si algo te hiciese chiquitillo, al ver que piden tantas cosas que piensas, qué has hecho todo este tiempo que no tienes ni la mitad de cosas de lo que piden… Pero a los cinco minutos decides reponerte, y te animas a ti mismo, le echas la culpa a la crisis y alejas esos fantasmas que nos hacen pensar que no tenemos talento. Según un estudio de Manpower el 35% de los parados no ha realizado una entrevista de trabajo en el último año, el 46% ha participado en algún proceso de selección una, dos o hasta tres veces en un año, y el otro 19% lo ha hecho en más de tres ocasiones. Al leer este tipo de informaciones, nuestro pesimismo vuelve a aparecer azotándonos de nuevo, y haciéndonos olvidar al YO VALGO para recordarnos el NO ENCONTRARÉ NADA. Hoy he conocido a una persona con magia, de esas personas que realmente consiguen hacer que veas cuando tu ceguera te lo impide, ceguera que es el miedo al fracaso camuflado. Me ha parecido interesante, y por ello me gustaría compartir con los pocos que puedan leer esto, un pedacito de esa magia, porque quizás los que se encuentran desanimados y perdidos, en este camino duro y pesado de la “búsqueda de empleo” , puedan aunque sea por un rato, “ver entre tanta oscuridad”.Ante todo, necesitamos reconocer nuestra imperfección, no somos perfectos, ni chicos diez, de hecho la excelencia es una utopía. Pero somos personas preparadas, la mayoría con una inteligencia media, tenemos recursos dormidos de los que ni siquiera somos conscientes, entre otras cosas, porque es el momento en el que nos enfrentamos a las situaciones, cuando los utilizamos. Y sino, pensad cuántos de vosotros no os habéis dicho en alguna ocasión “pensaba que no iba a ser capaz, pero al final he podido”. El enfrentarnos a situaciones complicadas, hace sacar los mejor de nosotros mismos. Necesitamos creer, necesitamos el ensayo error para conseguir esa experiencia, y no en un puesto de trabajo, sino experiencia en la vida, en saber que la esperanza y la ilusión son el motor que nos mueve cada día, y a ser conscientes de que dentro de nuestras cabezas, puede estar una gran idea a punto de ser descubierta. Precisamente ayer leí un artículo, era una entrevista a la empresaria Catalina Hoffmann, socia fundadora y consejera de la cadena de franquicias Vitalia, a la que le han otorgado el premio emprendedores a Pyme 2012. Ella montó la empresa con tan sólo 26 años, contaba que mucha gente la intentó quitar la idea de la cabeza, porque no era, según los bien avenidos, una idea viable. Y como bien dice esta empresaria de éxito, cuando uno dice que quiere hacer sus sueños realidad, mucha gente te dirá que es un imposible, y que lo que hay que hacer es no escucharles, o escucharles, pero no hacerles caso.Os dejo un vídeo, es un fragmento de la película “En busca de la felicidad”, que nos recuerda que no podemos permitir que nadie nos diga lo que no podemos hacer.
Cada uno será lo bueno que quiera ser.(Paul Arden)