El evento se realizó en mayo a 160 kilómetros de Los Ángeles pero no fue revelado hasta julio pasado. No se trató de una baja en un jet de algún país enemigo sino, por suerte, de una simple sesión de entrenamiento entre la Marina y Raytheon, una compañía desarrolladora de tecnología de defensa. Rayutheon derribó varios vehículos aéreos no tripulados en el campo de pruebas de la Armada estadounidense en la isla de San Nicolas, frente a la costa de California.
La nave estaba viajando a aproximadamente unos 500 kilómetros por hora sobre el Océano Pacífico y el láser fue disparado desde un barco. Lo curioso de todo esto es que a la vista humana nada había sucedido y para darse cuenta de lo que en realidad estaba pasando lo que hay que hacer es observar al afectado. Cuando la nave esté cayendo prendida fuego significará que el francotirador del futuro acertó en el blanco.
Se llama Laser Close-In Weapons System, y produce un láser de 50 kW que puede ser utilizado tanto para disparar lásers como para el sistema de misiles convencional que se conoce hasta ahora y más allá que estos tests que se realizaron tuvieron éxito no estará listo para ser utilizado en el campo de batalla hasta el año 2016.
A pesar de todas sus ventajas y lo que significa un enorme paso para la tecnología de armas láser, el sistema aún no es perfecto. En este caso, la debilidad mayor es el clima. Aunque no tiene problemas con el día y la noche, en un clima de niebla y del aire húmedo del océano, la energía del láser podría ser absorbida antes de llegar al blanco. A esto se le suma otro detalle que fue admitido por Raytheon. Existen algunas superficies y materiales capaces de absorber el poder del láser. Según explicaron sus creadores, “todos los materiales reflejan, pero se puede superar con más potencia”.
El láser fue disparado desde un barco frente a la costa de California.
Aunque la idea de los lásers que pudieran destruir cosas está entre el imaginario de la población y los científicos desde su creación en el año 1960 la realidad es que la posibilidad de crear una reacción química era imposible y por eso no se implementó en la tecnología militar.
Los láseres en estado sólido utilizan vidrio o un material cerámico para generar el rayo, son pequeños, más compactos y requieren menos energía que los químicos, que son mucho mayores y además utilizan con frecuencia un combustible tóxico, que exige protección especial. Recientemente se logró desarrollar un láser como este que puede generar la suficiente potencia para poder tener el poder necesario para generar esta reacción.
El director del semanario Jane's Defence Weekly, Peter Felstead, declaró a la BBC, que da la noticia, que el sistema desarrollado por Raytheon significa el principio de las aplicaciones de esos tipos de láseres para fines militares. "Es de esperar, dijo Fesltead, que las empresas miniaturicen esa tecnología y doten a esos láseres sólidos de mayor eficacia". Por su parte, el vicepresidente de Raytheon Missiles, Mike Boen, afirmó que las pruebas realizadas, en un entorno marino, representan un gran paso adelante en la tecnología basada en los láseres.
"Por primera vez se logró neutralizar una amenaza de ese tipo de vehículos aéreos en un entorno marino", afirmó Boen, según el cual el láser puede montarse en el interior de un barco y enviarse el rayo por cables de fibra. La empresa estadounidense trabaja también en un sistema gemelo basado en tierra para su posible uso contra morteros y lanzamisiles.
Fuente: BBC
El Skyguard o "Guardia del cielo" es un sistema láser de defensa desarrollado por la compañía Northrop Grumman (NOC).
Quantum opina:
Otra compañía, Northrop Grumman (NOC), ha logrado desarrollar un láser de gran magnitud capaz de funcionar durante 10 minutos sin parar; skyguard o "Guardia del cielo" es un sistema láser de defensa que lleva trabajando un tiempo para el ejército de los Estados Unidos y se le considera un arma futurista, pues la misma se prepara para ser enviada a la descomunal White Sands Missile Range en Nuevo México, donde empezará hacer lo que mejor sabe hacer... destruir.
La última vez que este láser tuvo una prueba oficial, duró solo 5 minutos seguidos. La idea es que este láser pueda realizar un ataque sostenido y “más efectivo”. Su capacidad de generación es de unos 100 kilovatios. Un láser de 100 kW rápidamente puede calentar un objetivo provocando efectos catastróficos, tales como la explosión de una cabeza nuclear o iniciar destrozos en los fuselajes. Su uso no esta ligado solamente al ataque, puede ser instalado en helicópteros o aviones para fines defensivos, como por ejemplo la destrucción de misiles teledirigidos desde el blanco de ataque.