Toda catástrofe de cualquier índole conlleva muchas pérdidas. Es terrible la imagen de los supervivientes de terremotos, inundaciones, huracanes y demás viendo cómo pierden a sus familiares y sus hogares. Hoy quiero contarles la historia de Michael Reynolds, un arquitecto de 63 años que ya lleva a sus espaldas construidos cientos de hogares con materiales como cartón, ruedas, botellas y así un largo etcétera de materiales que puedes encontrar como escombros en cualquier zona catastrófica.
Una de las construcciones de Michael Reynolds
Michael practica lo que él llama “Bioarquitectura”, pues todas sus construcciones son altamente sostenibles, requiriendo un aporte energético mínimo para funcionar. Él ya explotaba estos conceptos a través de su compañía, dedicándose a construir casas de este tipo. Fue al llegar a la India tras el Tsunami y vió un país literalmente hundido hasta los cimientos cuando se puso a pensar alguna forma de ayudar a esta gente que lo había perdido todo.
Trailer de su película
Michael y su equipo son unos expertos en este campo, habiendo demostrado ya su valía durante el tsunami que afectó a la India hace unos años. El vídeo que tenéis justo encima de este texto es el tráiler de una película que se rodó durante su periodo de ayuda allí. La película se llama ‘Garbage Warriors’, o en castellano ‘Guerreros de la basura’.
Las ruedas parecen un sustituto perfecto a los ladrillos
A él le gusta llamar a este tipo de casas Earthships, que sin forzar mucho la traducción vendrían a significar más o menos Nave terrestre.
Reynolds con los destinatarios de una de sus viviendas en India
Su modelo de casa autosuficiente se ha extendido a lo largo y ancho del planeta, llegando a construir una casa de este tipo en un sitio con un clima tan duro como Siberia. Sus casas son tan eficientes, que de media cada una puede requerir unos 50 dólares anuales de mantenimiento. Las claves residen en aprovechar recursos naturales al máximo. Calentar el agua y la calefacción con energía solar y disponer de agua gracias al filtrado de lluvias son sólo algunas de las claves en las que reside la eficiencia de estas casas.
Vallas a modo de vigas para sostener el techo
Para finalizar, me gustaría señalar los dos aspectos que para mí me parecen fundamentales en este proyecto. El primer aspecto es obviamente el carácter humanitario de la iniciativa. No todos los días encuentras historias de gente que viaja alrededor del mundo construyendo casas a aquellos que lo han perdido todo. El segundo es el genio que reside en cada una de estas casas realizadas con los materiales más pobres pero con la máxima eficiencia en muchos aspectos. Si en estas condiciones esto puede funcionar, no imagino a qué niveles puede llegar con materiales más sofisticados.
Fuentes
La idea de hacer este post me la pasó el gran Pol. La historia me gustó mucho y me pareció interesante. El principio de la madeja viene de aquí y aquí, donde se hace una breve recolección de noticias breves sobre el asunto. También puedes ver mucho material en la página de la compañía de Michael, y concretamente en su galería de imágenes, donde hay un buen surtido de fotos de cada una de las intervenciones. También está interesante esta entrevista. Todas las fuentes están en inglés.