No sé si lo que voy a escribir merece la categoría de artículo, tan solo es mi opinión, y tampoco pretendo que ni tan solo uno de los colaboradores del blog esté de mi parte, pero estoy flipando en colores con las reacciones airadas por toda la red al haberla incluido en el cartel del FIB 2011.
A mi humilde entender nos estamos volviendo más papistas que el papa. Julieta es una artista de solvencia contrastada, que nunca ha dejado de dejar claro y evidente su alma y su pensamiento independiente (indie no podemos decirlo que quizá molesta), tanto en sus referentes musicales, como recomendándonos artistas siempre alejados del mainstream e incluso predicando con el ejemplo y ser producida por un crack como Mastretta, el cual también fué su pareja.
Recuerdo las mismas reacciones cuando hace pocos años también se incluyó en el cartel al grandísimo Kiko Veneno y el mismo hizo un concierto espectacular y con la carpa a reventar de españoles y guiris, y todos disfrutando como enanos.
O el año pasado con unos rockeros de Discoplay como eran Los Ilegales, que allí si que no pintaban nada a mi entender y que incluso llegaron a hacer mofa del festival, del cartel y del público. Pero claro, lo que pasa es que Julieta Venegas ha vendido discos, ha ganado grammys y ha colaborado con artistas mainstream y con eso, ya merece el todo vale, y se abre la veda a ir a por ella.
Que está muy bien que haya muchísima gente que quiera tirarse el rollo con deerhunters y bestcoasts varios, que es lo lógico en cada tribu urbana disfrutar de los productos frescos de temporada, pero la gente que va a los festivales con la mente abierta, también debe tener derecho a disfrutar de un directo de una artista como ella, sin tener que pensar si eso traiciona su pose de modernillo de turno o de enteradillo de pacotilla, y que el mundo no termina con eso, que peores problemas tiene el universo entero.
En fin, que estando el mundo indie así, me temo que nunca tendremos a Tomeu Penya ni a Julio Iglesias jamás en el Primavera Sound, como se ha pedido en algunos lugares de la red, y realmente, me parece una pena.
Estamos todos locos.