En esta ocasión dedicamos nuestra sección “Artista del mes” a Pallavi Mahidhara, una precoz pianista con una larga trayectoria a pesar de su juventud.
Conocida mundialmente por su versatilidad artística, Pallavi Mahidhara es una pianista de origen indio-estadounidense que ha destacado en el mundo de la música por su asombrosa técnica y su carisma en los escenarios.
Debutó en una orquesta sinfónica a la temprana edad de 10 años en el Ravinia Festival de Chicago. Desde ese momento, no ha parado de trabajar en lo que más ama: la música.
LA FUSIÓN DE LO CLÁSICO Y LO CONTEMPORÁNEO
Tras formar parte de la Orquesta Sinfónica de Jóvenes Músicos de Disney en el Festival de Ravinia de Chicago, Pallavi Mahidhara colaboró con una de las orquestas más importantes de Estados Unidos con tan solo 14 años. Se trata de la Orquesta Sinfónica Nacional de Washington DC.
A este trabajo le siguieron muchos otros en orquestas sinfónicas de todo el mundo. En 2009, debutó en Sudamérica tocando para la Orquesta Sinfónica Nacional de Ecuador. Tres años más tarde, viajó a España para actuar con la Orquesta Sinfónica Freixenet en la ciudad de Madrid.
Con unos intereses musicales muy amplios, que abarcan piezas de compositores clásicos y obras contemporáneas, su trabajo en solitario es una fusión musical donde cada nota adquiere un valor transversal que marca el perfeccionismo de sus conciertos.
GRANDES COLABORACIONES MUSICALES
Esta capacidad le ha llevado a hacer realidad colaboraciones soñadas con grandes artistas del panorama musical. Entre las más relevantes, se encuentran su trabajo con Questlove, baterista de “The Roots”, y con la cantante Keren Ann, en un concierto donde la amalgama de la música clásica y contemporánea se tradujo en una ejecución llena de magia.
Son varias las ocasiones en las que Pallavi ha colaborado con ganadores de premios Grammy. Pero, sin duda, la más especial y reconocida fue con uno de los mejores compositores cinematográficos de la India, Vanraj Bhatia. De este viaje a sus orígenes, en 2004 surgió una gran obra de piano titulada “Fantasía y fuga en C”.
Su prolífica actividad y su carácter perfeccionista le han proporcionado numerosos galardones. Entre ellos, cabe destacar el segundo premio del Concurso Internacional de Piano de Ginebra, el premio al mejor concierto romántico en el Concurso Internacional de Piano UNISA, el segundo premio en el VI Concurso Internacional Prokofiev de San Petersburgo o el premio al joven pianista más prometedor, en Verbier.
NUESTRA ENTREVISTA CON PALLAVI MAHIDHARA
Dialogamos con Pallavi Mahidhara para conocer sus inquietudes y su inspiración. Esto es lo que nos contó.
- ¿Cuál es tu nombre completo?
Pallavi Mahidhara
- ¿A qué edad empezaste a tocar el piano? ¿Fue decisión tuya?
Empecé a tocar cuando tenía tres años. Estaba viendo un programa de televisión estadounidense para niños y vi que el presentador del programa tocaba el piano, así que les dije a mis padres que quería aprender eso. ¡Yo no recuerdo esta historia!
- ¿Cuál fue tu primer piano? ¿Lo sigues teniendo?
Empecé con un teclado eléctrico en casa cuando tenía tres años. Poco a poco, pasé a un piano vertical de Baldwin. Lo más destacado fue cuando, después de ganar un concurso nacional en los EE. UU. a los 13 años, Yamaha Pianos me regaló un Yamaha C3. Todavía tengo ese piano en la casa de mis padres.
- ¿Cuál ha sido el momento profesional más emocionante de tu vida?
Mi experiencia más importante fue cuando tenía 10 años. Asistí a un campamento de verano llamado Orquesta Sinfónica de Jóvenes Músicos de Disney como violinista. Una semana antes del concierto, me pidieron que reemplazara a un chico que iba a hacer un solo con la orquesta en el Concierto para piano No. 21 de Mozart.
No conocía el concierto y tenía unos dos días para aprendérmelo antes de que los ensayos con la orquesta comenzasen. La presentación tuvo lugar en el Festival Ravinia en Chicago, ante un público de miles de personas y fue televisado a nivel nacional. Esta fue también la primera vez que toqué con orquesta.
Esa experiencia y el concierto cambiaron el curso de mi vida. Fue entonces cuando decidí seguir una carrera como concertista de piano. La segunda experiencia más increíble de mi vida fue ganar el segundo premio en el Concurso Internacional de Ginebra en 2014.
- ¿Y el más complicado o frustrante?
Cuando llegó el primer confinamiento debido a la COVID-19 en marzo de 2020 y casi todos mis conciertos de ese año fueron cancelados.
- ¿Quién ha sido tu fuente de inspiración?
Mi querido profesor, quien falleció el año pasado, Dimitri Bashkirov.
- Si pudieras ser otra persona por un día, ¿quién te gustaría ser?
No quisiera ser nadie más que yo misma.
Evolucionamos y cambiamos constantemente a medida que crecemos, por lo que en una vida terminamos siendo mil versiones diferentes de nosotros mismos. Querer ser otra persona, incluso hipotéticamente, nos distorsiona de nuestra propia realidad y nos deja sintiéndonos desconectados de nosotros mismos.
El violonchelista Gary Hoffman dijo una vez: «Lo mejor que puedes ser es la mejor versión de ti mismo». Y yo vivo así todos los días.
- ¿Tienes alguna manía antes de salir al escenario?
¡Necesito hacer la siesta y necesito comer! No es importante calentar en un piano, pero me aseguro de que mi cuerpo y mis músculos están calientes al estirar y activar mis músculos. Pero lo más importante, ¡necesito comer!
- ¿Qué querías ser de pequeña?
Siempre decía: ¡Pianista, violinista o matemática!
- Si no hubieras sido pianista, ¿qué te hubiera gustado ser?
La música es algo sin lo que no puedo vivir, ¡así que estoy muy agradecida de poder hacer lo que amo todos los días! Pero si tuviera que elegir otra cosa, probablemente habría sido periodista o editora de libros.
Estoy explorando diferentes vías de creatividad a medida que maduro y, recientemente, he lanzado mi propio podcast. Se llama “The Conscious Artist” y es un espacio de conversaciones sobre la concienciación en salud mental para músicos, artistas y todos los seres humanos.
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