Si uno tiene la dicha de recorrer las calles de Brooklyn y Baltimore difícilmente pueda evitar ver las obras de Gaia. Un artista gráfico y escultor que mezcla con talento figuras humanas y animales. Le dá a sus obras ese aroma místico que encierra en figuras y retratos en blanco y negro, y es ahí donde fascina la forma que puede resumir con líneas simples los volúmenes y contrastes que dominan sus obras.
Gaia conjuga en sus figuras el aire místico de los animales dándole un gran sentido profundo que al verlos asociames con el pasado, en que lo humano estaba en gran unión con lo salvaje.
Es imposible de sentir en sus figuras un sentimiento oculto de captar los momentos y retratarlos en graffiti. Todo esto dotado de una sencillez por lo simple de sus líneas, que nos habla de una narrativa profundo creativa.
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