¿por fin en pie de guerra?
Durante bastantes años he formado parte del gremio de los asesores fiscales, e incluso formé parte de la junta directiva de la APAF (Asociación Profesional de Asesores Fiscales) durante algún tiempo. El caso es que la noticia que vi sobre este asunto hace unos días me sorprendió. ¿Los asesores fiscales acusando a Hacienda de algo? El colectivo siempre ha sido conservador y poco dado a las quejas. Yo mismo, en mis primeros años de profesión me mantuve en una posición en la que evitaba las quejas y los recursos atrevidos intentando siempre llegar a un entendimiento con Hacienda. No fue hasta años después de profesión continuada y constantes desengaños, cuando me planteé que debía cambiar mi forma de actuar, hasta el punto de que en ciertos foros se me consideraba una especie de oveja negra dentro del gremio de los asesores fiscales. Y puede que quien pensara así tuviera parte de razón. De hecho hace ya más de diez años que dejé la profesión porque me parecía bastante desagradecida en términos generales.
Es cierto que he seguido vinculado al mundo fiscal —para bien y para mal— porque mi continuidad profesional vino de la mano de Sociedades Urgentes y, se quiera o no, era algo muy relacionado con los asesores fiscales, pero yo ya no me consideraba como tal, salvo para asesorar a mis clientes de sociedades en las cuestiones directamente relacionadas con la compra de la sociedad.
El caso es que leer un titular así:
«Los asesores fiscales acusan a Hacienda de ocultar otra subida de impuestos a los autónomos»
… me ha arrancado una sonrisa. ¿Llegará por fin el momento en que los asesores fiscales dejarán de tenerle miedo a las represalias de la sacrosanta Hacienda? Que conste que hablo en términos generales porque asesores fiscales los hay de todo tipo, pero es muy habitual —demasiado para mi gusto— que los asesores fiscales sean reacios al litigio y aconsejen a los clientes no seguir adelante con ciertos temas para no enemistarse con Hacienda. Entre otras cosas porque temen que representar a un cliente en un caso conflictivo puede perjudicar a otros clientes de la asesoría. No digo que esta actitud sea la de un mal asesor, solo digo que no me parece la más conveniente para preservar los derechos del contribuyente porque en favor de la prepotencia administrativa.
Estaría bien que todos, sin excepción, luchasen por sus clientes presentando cuantas quejas fueran necesarias al Consejo para la Defensa del Contribuyente y no se les cayeran los anillos por aconsejar al cliente llegar hasta el último recodo del litigio para que Hacienda dejara de lucrarse indebidamente de los contribuyentes.
Ha dicho esta vez Arturo Casinos (Presidente de la APAF), al que considero amigo y siempre he respetado: «Hacienda ha ocultado la subida en la norma aprobada el 21 de diciembre, remitiendo a la disposición adicional 27 del texto refundido la Ley de Seguridad Social en un ejercicio de ocultismo y mala fe”. Los asesores han catalogado esta acción de Hacienda como de «escándalo».
Bien, espero que no quede esto así y no le acaben dando la espalda a Arturo, como también espero que vayan siendo más duros con Hacienda y esto no quede en una anécdota.
Aprovecho para recomendar a todo el gremio mi libro HACIENDA [NO] SOMOS TODOS
Ramón Cerdá