De autoproclamarse alcalde del empleo a encontrarse con las manos igual de vacías justo dos años después. De tomar las riendas de la ciudad con un censo de 78.175 parados a los 89.661 actuales. En estas dos frases se resume el periplo en materia de empleo de Juan Ignacio Zoido desde que asumió la alcaldía de Sevilla. Todo se quedó en un dulce sueño.
La excusa que esgrime el alcalde ni puede ser más infantil, ni tampoco encerrar mayor demostración de impotencia: “la Junta no me deja”. Son las consecuencias inevitables de prometer hasta lo que no se debe. Zoido está pagando ahora su exceso de verborrea en campaña electoral.
Aparte de culpar a los demás de todos los males que padece la ciudad y de una laxa inacción en materia de empleo en estos dos años, el alcalde ha hecho lo mismo que el resto de administraciones al respecto: recortar. El presupuesto total del área ha sufrido una bajada en su dotación del 9% durante lo que va de mandato.
Y puestos a competir en meter la tijera, en el gobierno consistorial se han puesto las pilas y no tienen nada que envidiar a nadie. Las dotaciones para talleres de empleo que la Junta ha rebajado un 27,7% con respecto a 2011, Zoido las ha recortado un 74% en el mismo período. Los proyectos de inserción laboral no corren distinta suerte. Mientras el resto de administraciones rebajan un 13,3% sus aportaciones, el regidor hispalense mete un tijeretazo del 47%. Así no hay quien cumpla un sueño.
En “El hombre que soñó ser el alcalde del empleo” te contamos cómo ha sido la gestión de Zoido en un área tan crucial durante estos dos años. Es la última entrega del balance de Gobierno que hemos realizado en sevilla report y sevilladirecto.com.