Organizar un TEDx no es "moco é pavo" diría mi abuela. Este evento poco tradicional llega a consumirte casi todo tu tiempo. Obviamente tus tareas habituales y tu familia no tardan en pasarte factura. Es por ello, que recién una semana después logro hacerme algo de tiempo para escribir sobre cómo viví esta experiencia única e increíble.
No pretendo efectuar una valoración imparcial sobre el evento porque tal cosa no existe y, mucho menos, cuando te corresponde hablar de “tu hijo”. Además, ser organizador te brinda una visión muy particular, que no tiene mucho que ver con lo que viven los asistentes. Podría escribir un post completo acerca del “caos controlado” que ocurría mientras ustedes disfrutaban tranquilamente de las charlas pero, como decía mi abuela, “sarna con gusto no pica” así que siempre fue disfrute.
La parte más fácil de organizar TEDxResistencia fue pedir la licencia. Llevado por el entusiasmo, las ganas y las buenas intenciones, completamos el formulario sin tener la menor idea en lo que no estábamos metiendo. Gracias a Dios fue así o sino nunca lo hubiéramos hecho. Creo que uno se da cuenta de la magnitud real de “la cosa” cuando faltan uno o dos meses para el evento.
Como fuimos los primeros en organizar un TEDx de la región, nos tocó lidiar con un pequeño inconveniente: muy pocas personas sabían de qué se trataba TED/TEDx, por lo que tuvimos la maratónica misión de dar a conocer a nuestros potenciales oradores, sponsors y a ustedes el real significado del evento y teníamos que comunicarlo de tal manera, que contagie nuestro entusiasmo y pasión para que se transforme en un evento sin precedentes. Aquí el equipo saco lo mejor de cada uno y los resultados estuvieron a la vista, los números son apabullantes:
11 oradores, 8 horas de evento, 3 shows artísticos en vivo, +30 sponsors, +3.100 seguidores en las redes sociales, 2 veces Trending Topic en Argentina, 20 miembros en el equipo, 15 colaboradores.
Lo magnifico que tiene un TEDx es que saca lo mejor de cada persona, tanto de lo oradores, como de los organizadores y, obviamente, también del público (basta con señalar detalles, como que los asistentes devolvieron anteojos de sol y celulares perdidos, cuestión no muy habitual, lamentablemente, en nuestro país). Se respira un aire de mucho optimismo, fe en la humanidad, algo casi indescriptible que sólo la gente que presencia en vivo este tipo de evento lo entiende.
Sobre Ustedes “El público”
Max Goldenberg, el histriónico maestro de lo describe mejor que nadie en su blog:
No existe público más generoso que el de un evento TEDx. Son abiertos, 100% espontáneos, totalmente dispuestos a asombrarse y dejarse llevar por las charlas de una manera nunca antes vista
Si bien durante el evento, no tuve la oportunidad de conversar con mucha gente del público porque estaba inmiscuido en el “infierno de los detalles” tratando que la cosa salga lo mejor posible, en los días posteriores recibí mucho feedback y comentarios de los asistentes. Me enteré de gente que viajó muchos kilómetros sólo para estar y vivir la experiencia. También se de personas que se lloraron todo, incluso escuchando las charlas por streaming, si lo leyeron bien, “escuchando las charlas por streaming” Una hora antes del evento se nos quemó la placa encargada de llevar el video al canal de streaming y por más que dimos vuelta Resistencia no pudimos encontrar otra igual, con lo que solo pudimos mandar audio. Así y todo llegamos a tener 300 personas escuchándonos!!
También recibí muchísimas sugerencia sobre cuestiones a mejorar pero, todo dicho y explicado con mucha buena fe, como lo haría una madre con su hijo, con la real y sincera intención de que el próximo evento sea mejor todavía.
El lugar
La flamante y emblemática Casa de las Culturas fue "EL LUGAR” para el primer TEDxResistencia. Realizamos una ardua tarea para convencerlos y que apoyen el evento, pero indudablemente, estuvieron a la altura de las circunstancias. Todo el personal estable trabajó con la misma dedicación y profesionalismo como si fuera su propio evento, cuestión que nos hizo sentir muy a gusto y tranquilos.
Los oradores.
Sólo tengo dos palabras para estas bellísimas personas: “impe”-“cables”
No sé si en todos los TEDx pasa lo que nos ocurrió a nosotros. No solo entablamos inmediatamente una relación de confianza con los 11 sino que además hubo una gran conexión con todos y cada uno de ellos.
Particularmente, aprendí muchísimo y me dieron (y nos brindaron) un montón, aprendimos un mutuamente de una forma considerable, me dieron mucha fuerza y aliento, cada vez que lo necesitamos, se mezclaron con el equipo y todos formamos una gran familia y creo que eso sumado a sus increíbles historias e ideas difundidas se convirtió en un cóctel explosivo que el público supo aprovechar.
El equipo
En mi vida, me tocó trabajar con mucha gente en diversos equipos, pero el grupo de personas que conformó el equipo de TEDxResistencia fue extraordinario, fuera de lo común. La garra, dedicación, tiempo y pasión que puso esta gente fue increíble. Sinergia por donde se lo mire.
Pero atentos, que eso no significa que era todo paz y amor, al contrario no se dan una idea de cómo peleábamos, pero en todo momento el objetivo fue claro y eso hizo la diferencia. Cada uno asumiendo responsabilidades y cumpliéndolas, sin por ello dejar de colaborar con el resto. Esto sí que fue genial.
Comparto algunas situaciones, a modo de ejemplo, para que se den una idea sobre lo que debíamos resolver, en un grupo donde pocos se conocían y el factor común era la pasión el profesionalismo que cada uno desarrollaba en su área:
- Teníamos que identificar y reclutar a los oradores para luego, involucrarlos con todo el proceso de curado de la idea iban a contar.
- Teníamos que identificar y conseguir sponsors, lograr que no solo pongan plata sino que apuesten y se jueguen por el proyecto.
- Teníamos que conseguir el lugar perfecto para las charlas y diseñar toda la ambientación dentro y fuera de auditorio.
- Teníamos que implementar un complejo sistema de cámaras, luces y sonido.
- Teníamos que diseñar la imagen y toda la gráfica de TEDxResistencia, montar el sitio web, presencia en las redes sociales, diseñar campañas de difusión y tener una fluida relación con todos los medios de comunicación.
Todo esto sin mencionar las cuestiones legales, relaciones institucionales, seguridad, logística, etc.. Obviamente cada una de estas actividades no son independientes y están íntimamente relacionadas y, sin duda, requieren de mucha coordinación entre los distintos miembros del equipo.
Una anécdota:
No saben lo difícil que es conseguir alfombras rojas circulares en el NEA. No recorrimos c/u de las casa del ramo sin suerte, algo que parecía una tarea menor, nos llegó a quitar el sueño la última semana. Me volví un experto en el tema tratando de encontrar la solución. Por suerte “Arlekin”, un comercio de Resistencia, se apiadó de nosotros y no solo consiguió la alfombra, sino que la cortó y realizo las terminaciones en tiempo record.
Por si a alguien no le quedó claro, por toda esta movida que armamos, no recibimos un sólo peso como remuneración. Es más, pusimos plata de nuestro bolsillo para que hasta los detalles salgan lo más profesionales posibles. Le sacamos tiempo a nuestro trabajo y familias, terminamos totalmente agotado pero increíblemente felices y orgullosos de nosotros mismos y de las personas que nos apoyaron incondicionalmente.
¡Les recomiendo que entren a http://www.tedxresistencia.org/organizadores/, los conozcan y se comuniquen con ellos, no se van arrepentir, son excelentes personas!
En resumen, este tipo de eventos se logra con mucho pero mucho laburo, cientos de noches en las que te vas a dormir preguntándote ¡¿quién me llevó a meterme en esto?! y corridas por todos lados, pero finalmente, como todo lo que se hace con esfuerzo, tiene una invaluable recompensa. TEDxResistencia fue y sigue siendo una de las mejores experiencias de mi vida, se lo recomiendo a quien quiera escuchar.
Esto te deja bien en claro que un mundo mucho mejor es posible y que existe muchísima gente (con perfil muy bajo) que está contribuyendo para que esto ocurra.
¡Los espero en el próximo!