Asterios Polyp es la vuelta de David Mazzucchelli, dibujante estadounidense conocido por sus colaboraciones con Frank Miller (Batman: Año uno). Este cómic es el fruto de 10 años de trabajo, y tanto esfuerzo ha sido recompensado con numerosos premios Eisner y Harvey. Antes de que se me olvide, también hizo la adaptación de la novela Ciudad de cristal de Paul Auster, la cual también está reseñada en el blog.
Asterios Polyp es el protagonista de esta personalísima historia ya que nos cuenta el viaje emocional de Asterios. Éste tiene 50 años y es un alabado arquitecto aún sin haber construído un sólo edificio, por lo que se dedica especialmente a la docencia en una prestigiosa Universidad. Uno de los acontecimientos que más obsesiona a Asterios es su hermano gemelo, el cual falleció en el momento del parto y esto ha sido para él una fuente constante de suposiciones sobre el transcurso de su vida. Un día, ve como un rayo destruye su casa y es entonces cuando sufre una catarsis. Asterios decide abandonarlo todo y comenzar una nueva vida rompiendo con su etapa anterior. Hay que decir que una de las características de Asterios es su enorme egocentrismo, frente a la humildad de su ex-esposa Hanna.
Los personajes están muy bien diferenciados, Asterios está dibujado en diversas tonalidades de azul dependiendo de su estado mientras que Hanna es dibujada en rosa.
Es una historia que mezcla filosofía y cotidianidad, ya que como buen arquitecto, Asterios analiza sus ideas desde el punto de vista geométrico de simplicar las formas combinándose con flashbacks de su vida anterior y trozos de la presente. Es interesante cómo Mazzucchelli combina este viaje interior con filosofía antigua, ya que Asterios sería Apolo (Dios de la luz, la verdad y las artes) y su esposa y su hermano muerto Dionisios (Dios del vino, de la locura y el éxtasis).
Es una obra muy recomendada en el que muchos pueden verse identificados de una u otra forma.