Tras muchos meses en un silencio forzado por “problemillas personales de agenda” he necesitado romperlo, lanzando este post desde Rincón Docente, aportando mi voz a esa marea de profesionales que están mostrando públicamente su indignación ante el inexplicable cese de Galo Sánchez al frente de la Oficina de Evaluación de Medicamentos del Servicio Extremeño de Salud.
Para mi lo más importante no ha sido la calidad del trabajo sobre metodología GRADE realizado ni la referencia nacional que está suponiendo las publicaciones recogidas en EVALMED con una voluntad docente tan explícita. Lo realmente importante es la capacidad que ha tenido de formar un grupo numeroso (y extendido por toda la comunidad) de profesionales comprometidos en elaborar una valoración independiente y rigurosa del uso de fármacos.
Bastaría una reflexión mínimamente juiciosa para entender que en estos tiempos de recortes económicos la tarea no es recortar (se ha demostrado que no es muy difícil ya casi nos dejamos hacer cualquier cosa) sino encontrar nuevos caminos que permitan un uso racional de los cada más limitados recursos de los que las administraciones públicas van a disponer.
El trabajo de Galo ha permitido ilusionar a numerosos profesionales en estos tiempos tan grises. Les estaba habilitando para elaborar una información terapéutica independiente, no sujeta a otro interés que el de determinar la utilidad real de cada fármaco.
Una iniciativa novedosa orientada al uso RACIONAL (por reflexivo) del medicamento ha sido decapitada quizás en pos de un uso RACIONADO del medicamento que parece ser la única idea para mantener “la viabilidad del sistema sanitario público”.
Prefiero creer que esta decisión obedece únicamente a la torpeza y que no hay detrás ningún interés económico. Al fin y al cabo los laboratorios deben seguir “investigando” al mismo tiempo que los bancos siguen “prestándonos” dinero para hacer realidad nuestros sueños.
Este cese no es un sueño sino una pesadilla que no podía menos que compartir. Hace unos años el periódico Salud Extremadura nos enseñaba “el primer producto de la Oficina de Evaluación del Medicamento”- Ojalá no hayamos visto ya el último: Clinicamente relevante además de estadisticamente significativo.
Te deseo suerte en tu centro de salud, otra vez de soldado raso. Un abrazo amigo.
Luis Lozano Mera @llozanom