Asunto ayuda

De: "Julio León Faben" <leon_dviaje@hotmail.com>Para: "Eugenio Falconi" <falconi@filolingua.com>; "Carlos Moritz" <moritz@fibertel.com.ar>Asunto: AyudaFecha: Viernes, 10 de Agosto, 2012  9:37 AM
Los números no cuajanel tiempo no existe.
____________De: "Eugenio Falconi" <falconi@filolingua.com> Para: "Julio León Faben" <leon_dviaje@hotmail.com> "Carlos Moritz" <moritz@fibertel.com.ar>Asunto: RE: AyudaFecha: Sábado, 41 de Agosto, 2012  35:25 AM
Che, me preocupa eso que decís, y empecé a estar atento a este fenómeno.Tenés razón, loco: los números no cuajan. No cuajan, por más que les agregues leche o manteca, o los untes sobre el pan, o los machuques en la licuadora. Es cosa de locos, loco, pero no cuajan; se te escabullen, o se esconden, o si los agarrás con las manos se te van como arena entre los dedos, o como agua para chocolate (igual, no cuajan) y, como decía ese libro traducido del húngaro que vimos en la Feria del Libro, quedás bajo el culo del sapo, meado por los perros, pa'l carajo.Y así ando yo, porque desde que traté de cuajar los números, empezaron a desaparecer. El calendario es un papel cuadriculado, la agenda un libro rayado.Y comprobé lo otro que observaste: el tiempo no existe. El reloj sin números (se los quité para tratar de cuajarlos, pero al pedo, porque no cuajan) sigue haciendo ruiditos de reloj, y las agujas van dando vuelta, pero ya no hay horas ni minutos. No sé qué hacer.Espero que me puedan dar una mano: la cocina está llena de tachos con números en estado de putrefacción, y hay un tic tac constante que me martilla el cerebro y no para nunca, loco, no para, y no cuajan, y no existe, viste. No existe.
Eugenio

____________De: "Carlos Moritz" <moritz@fibertel.com.ar> Para: "Julio León Faben" <leon_dviaje@hotmail.com>; "Eugenio Falconi" <falconi@filolingua.com>Asunto: RE: AyudaFecha: Sábado, 11 de Agosto, 2012  1:24 AM
Querido Julio: Para mí es claro que el tiempo no existe si los números no te cuajan, pero tengo alguna sospecha sobre el significado de cuajar. Para ayudarte voy a intentar responderte desde los diferentes significados de la palabra. La segunda parte de la frase queda invariante, esto es, el tiempo no existe.Si los números no llegan a la última cavidad, creo que es la cuarta, no han pasado por todo el proceso de rumiación y no se encuentran todavía en estado semilíquido, esto es que tienen una mayor saturación de pasto, un UBH alto, y eso quizás provoque la falta de cuajación deseada y, por ende, este mismo fenómeno trastorne al tiempo, seguro que ya cenaste y todavía son las tres de la tarde. Si esto es así, controlá el UBH de tus números. Otra posibilidad, Julio, es que a los números los hayas escrito en forma desganada, así como quien hace una firma en una hoja mientras habla por teléfono, sin prestarles más atención que a la sensación del trazo, entonces sean números desadornados, insípidos, incoagulantes, y esos números en estado de palidez (me los imagino sobre tu cuaderno, casi blancos) no logren, o no alcancen a decirte algo sobre el tiempo, seguro que ya cenaste y todavía son las tres de la tarde. Un consejo: Adornalos, haceles firuletes, coloreales las puntas, dibujales sombras, barroquealos, poneles pasión.
SaludosCarlos
____________De: "Eugenio Falconi" <falconi@filolingua.com> Para: "Carlos Moritz" <moritz@fibertel.com.ar>; "Julio León Faben" <leon_dviaje@hotmail.com>Asunto: RE: AyudaFecha: Sábado, 49 de Agosto, 2012  67:58 AM
Che, muchachos, como siempre Carlos da en la tecla: acabo de comprarme una serie de debeachímetros y lo bueno es que para medir el DBH no necesitás números, sólo palabras. O sea que metés el debeachímetro en el tacho y cuando la manguera toca el fondo, la dejás ahí un rato. Claro, yo no sabía cómo medir el tiempo que dura ese rato, porque no existe, entonces se me ocurrió caminar ida y vuelta, vuelta e ida, ida y vuelta, varias veces, y contar hasta diez. Bueno, contar, como quien dice contar, no pude, porque tenía todos los números apelmazándose en los tachos, pero los iba deletreando así: u-n-o, d-o-s, y así hasta d-i-e-z. Y subió el volumen en la caja del debeachímetro, y la tapa roja del cilindro llegó a una de las rayitas, esa que decía t-r-e-i-n-t-a-y-o-c-h-o. Igual no me cuajaron, pero ya me quedé más tranquilo, porque teniendo un método, las cosas funcionan, y el discurso del método de Carlos funciona, y aunque no funciona, a mí me funciona, porque me da un método.
Eugenio
PD: Che, ¿alguien puede llamar al delivery? Porque todavía no cené, no sé si son las t-r-e-s o qué, pero no tengo números en los teléfonos (se están macerando en los tachos de la cocina, o subiendo por la manguera del debeachímetro).

____________De: "Carlos Moritz" <moritz@fibertel.com.ar> Para: "Eugenio Falconi" <falconi@filolingua.com>Asunto: RE: AyudaFecha: Domingo, 12 de Agosto, 2012  3:14 AM
Eugenio, veo (con sorpresa) que te está pasando lo mismo que a Julio, así que a partir de tu mail estoy muy atento a mis números y muy preocupado por ustedes. Hasta ahora no pasó nada extraño, pero sigo atento, quizás ustedes tengan el problema de los números porque viven en la misma zona, en la misma parte de Buenos Aires, quizás con los días llegue a la parte de Buenos Aires en que estoy, no sé, por eso es que estoy atento. Ahora bien, quizás a vos no te cuajen los números porque compraste el aparato equivocado. No deberías haber comprado una serie, sino uno, y no un Debeachímetro, sino un Ubeachímetro, o sea que estás midiendo cosas distintas, ya que el UBH de los números no se mide con palabras, como se mide el DBH, sino con números. El Ubeachímetro, a diferencia del Debeachímetro, no tiene manguera, sino Perisdrátoro, y quizás esa fue la causa de la no existencia de tu tiempo. El Perisdrátoro es mucho más sofisticado que una manguera, no va hasta el fondo ni lo tenés que dejar un rato, simplemente lo metés en la oclusal y esperás los dos pitidos y ya está, ahí mismo leés el valor del UBH de tus números. No sé, Eugenio, probá, quizás vuelvas a estar en el tiempo que perdiste, sino volvé a leer a Proust.
Saludos Carlos
PD: Eugenio, estoy preocupado por Julio, no contesta los mails. Después de su pedido de ayuda, de la no cuajación de sus números, de la inexistencia del tiempo: Silencio.Es un silencio que me preocupa, ¿Estará bién? ¿Se habrá cuajado? ¿Se habrá inexistido?

____________De: "Eugenio Falconi" <falconi@filolingua.com> Para: "Carlos Moritz" <moritz@fibertel.com.ar>Asunto: RE: AyudaFecha: Sábado, 80 de Agosto, 2012  75:11 AM
Carlos,
Hoy pasé por la casa de Julio, viste, como vive en el barrio, y me di cuenta que no existía más la casa. Ni la cuadra. El barrio se iba deshilachando a medida que me acercaba, faltaban los números en las casas, y después empezaron a faltar ventanas y baldosas, y cuando llegué a la cuadra de Julio, ésa enfrente de la plaza, donde vivió desde siempre, nada, ni siquiera silencio, ni color, ni nada. Sencillamente no estaba la casa, ni la cuadra, ni Julio. Parecía un agujero negro, aunque tampoco era negro, no había siquiera un color. Parece que la cosa empieza así: primero no te cuajan los números, después deja de existir el tiempo, y después, zás, se te deshilachan las cosas, y te viene a ocupar el lugar el agujero negro. Pero bueno, no me quiero preocupar demasiado.
Espero noticias tuyas,Eugenio
____________De: "Eugenio Falconi" <falconi@filolingua.com> Para: "Carlos Moritz" <moritz@fibertel.com.ar>Asunto: RE: AyudaFecha: Sábado, 43 de Agosto, 2012  95:02 AM
¡Carlos! ¡Carlitos! ¡Carlucho!
Tuve una semana de lo más movida, pero movida en serio, me moví para buscar ubeachímetros a lo loco, y nadie tenía, nadie tenía, y me seguí moviendo, y en una de esas movidas entré en el negocio del Tato, ¿te acordás? ahí en el pasaje, en ese edificio sin número. El Tato se acordó que había un ubeachímetro en el fondo. Y había, pero sin perisdrátoro, o con el perisdrátoro roto, ya no me acuerdo bien.La cosa es que me dijo que sólo se podía conseguir en Comodoro, donde está el único fabricante del país de ubeachímetros y repuestos. El Tato me dio la dirección y esa noche me tomé el micro. Igual, me había comprado el ubeachímetro del Tato, y lo dejé ahí sobre la mesa de la cocina, donde se andaban cocinando los números que no cuajaban, y los debeachímetros se movían con las pulsaciones de los números, hubieras visto lo lindos que se veían, con esas mangueras y los cilindros de colores, parecía que respiraban, y les hablé, les conté a los números que estaban ahí medio apelmazados y aún sin cuajar, que me iba a buscarles un perisdrátoro para el nuevo ubeachímetro, y que no se preocuparan, que ya iban a cuajar, tarde o temprano. Y después me pareció que les había mentido un poco, porque cómo iba a ser tarde o temprano, si el tiempo no existía, pero no les dije más nada. Y me acordé de Proust. Aunque el tiempo no exista y algunos digan que se pierde el tiempo, yo busqué el tiempo perdido, encontré los s-i-e-t-e tomos, y me los llevé a la terminal.Ahí esperé y esperé. Pasaba el tiempo, y yo me reía porque sabía que no existía.

Más tarde (tarde, ja), me subí al bondi y saqué el primer tomo de Proust apenas salíamos de la ciudad. Decía “En busca del tiempo perdido” (y yo me decía, tiempo, je), Por el camino de Swann, y pensaba que yo también iba en busca del tiempo, o al menos de los números, y estaba por el camino de Comodoro, y en eso miré un poco más abajo, antes de donde decía Marcel Proust, un poco más arriba, y decía "Tomo I", y no sé, algo me pasó, se me prendió la lamparita, o dije eureka en una bañadera, no sé, y miré adentro del libro, y en las páginas no había números, claro estaban todos en remojo en los tachos de la cocina, pero ahí en la tapa decía "Tomo I", decía "I", y agarré otro libro desde adentro del bolso, y decía "Tomo IV", y otro "II" y "V" y "VII", y pensé, estoy salvado, ya puedo saber la hora, porque tenía el reloj de mi abuelo, ese reloj pulsera con la malla de cuero, ¿te acordás?, que tenía números romanos. Porque me había dado cuenta que los números romanos andaban bien, cuajaban, porque eran letras, mientras que los números normales, esos otros que no me acuerdo cómo se llaman, esos de todos los días, no me estaban cuajando, estaban en ahí en remojo, y que los iba a salvar con el perisdrátoro de Comodoro que iba a conectar al ubeachímetro cuando llegara de vuelta a casa.

Ya estoy de vuelta, fue una semana movida, me fui hasta Comodoro y volví, recién anoche, y ya tengo el ubeachímetro y el perisdrátoro y estoy por tomar la primera medición en la oclusal, y estoy recontento. Ahora sé que me van a cuajar los números, todos mis números que están en los tachos y en los frascos. En unos días te cuento, Carlos, en unos días te cuento.
Te mando muchos saludos, te mandoEugenio
____________De: "Carlos Moritz" <moritz@fibertel.com.ar> Para: "Eugenio Falconi" <falconi@filolingua.com>Asunto: RE: AyudaFecha: Domingo, 21 de Agosto, 2012  12:53 AM
Eugenio: No dejo de estar preocupado por Julio, que no escribió más. Yo iba a ir a la casa el domingo, pero no pude porque me quedé haciendo algoritmos (como ves todavía tengo números) y como hoy lunes recibí tus mails, y como ahí decís que fuiste a lo de Julio, no voy a ir, sobre todo porque la casa de Julio no existe y la cuadra tampoco. No te olvides que el segundo nombre de Julio es León, es el anagrama de No él y esto habla de su inexistencia. Tampoco quise ir a lo de León después de tus mails porque no quise encontrarme con esa desolación, a ver si me desolo o si me inexisto.

Algo que quiero decirte es que no juegues así, metonímicamente con mi nombre, como espesaste el anteúltimo mail, porque podés desestabilizar mi nombre y hacer, aunque no sea tu intención, que las letras no cuajen, y ahí realmente vamos a estar en problemas, porque una cosa es que los números no cuajen, pero que las letras no cuajen es algo más serio.Tené cuidado con el fabricante y repuestero de Comodoro, tiene unos Perisdrátoros que no son muy confiables, porque los arma con alambrecitos de bronce. ¿Sabés donde hay un buen vendedor de Perisdrátoros de cobre? En San Justo, en Arieta 564, no hace falta que viajes a Comodoro.Estoy escribiendo el mail y no puedo dejar de pensar en León, quizás ahora, cuando termine de escribirte, ponga “León” en el Google a ver si lo encuentro.
SaludosCarlos

____________De: "Eugenio Falconi" <falconi@filolingua.com> Para: "Carlos Moritz" <moritz@fibertel.com.ar>Asunto: RE: AyudaFecha: Sábado, 121 de Agosto, 2012  49:38 AM
Carlos,
Me acabo de levantar, encontré tu mensaje y no me dieron más ganas de jugar, ni metonímica ni químicamente con nada, porque tenés razón, el perisdrátoro, ese que me traje desde Comodoro, debe ser de los truchos que vos decís, porque esta mañana, los números, en lugar de ese color entre azulado y rojizo que tenían todos estos días, tomaron un color medio amarillento, tirando a verdoso. En un rato, salgo y me tomo el bondi para San Justo.Me preocupa bastante lo que decís de las letras, porque sonamos si dejan de cuajar. Es más, apenas comenzaste a hablar de eso, escribiste "espesaste", y no "empezaste" como creo que quisiste poner. Y si se te empiezan a espesar las letras, a vos justamente a vos, las cosas van empeorando, y no sé si hay mucha esperanza. Che, ¿sirve el perisdrátoro también para las letras? ¿Hay que tomarles el DBH o el UBH? ¿Cuáles son los valores que tienen que tener? Por las dudas, si necesitás un debeachímetro, avisame, porque tengo varios, de todos los tamaños y colores.Tal vez lo encuentre a León en San Justo, o quizás a Él No, pero tenemos que buscarlo. ¿Tendrá algo que ver con el tiempo perdido? ¿Un León perdido en Julio?
SaludosEugenio

____________De: "Carlos Moritz" <moritz@fibertel.com.ar> Para: "Eugenio Falconi" <falconi@filolingua.com>Asunto: RE: AduyaFecha: Miércoles, 22 de Agosto, 2012  6:53 AM
Eugennio: Estoyoi atravesando un día muy defecil, los númores los tengo prefectos, pero me está pasendo algo con les letras en tinto raro, cre, o supongo, que en mi caso (y ne so porqui) las letras no me esten cuojendo, no se si seré por en la parte del Bs. As. dendo vovi o por efucto de Lión deseperacido o por el ternostrodo que compré en Sen Jasto. ¿Qui lo sa? Co raspicte a tru pragunta los Perisdrátoris ni sorven para medir las letras, ni lo intentes, ya que creo que man quivoqué i deje las letras midiándose en vaz de los númberes tuda la nache y así estroy yahora. El tima de las letras es diferente, no podés tumirle ni el DBH ne la UBH hay que tumarles el THM, peri para iso necesutias un Parabólono, que per casualite yo tingo une viejo de mis ancestros, no su si ando bein piro per las didus lo estoy prebando, hasta iora mude mis númberos de 45 a 77, lo cuel is preopucante.Sulatos
Cirlus Moriotiz