Asuntos económicos a diferentes escalas

Me preocupa el estado de la economía, a cualquier escala, pero indudablemente me preocupa mucho más la local y, concretamente, la del Ayuntamiento de Ibi. Ahora mismo se tiene que estar trabajando en el cierre contable del ejercicio 2009, que tiene que estar listo para el día 15 de mayo próximo, y algo me dice que nos encontraremos con alguna sorpresa. El asunto de la recuperación del IVA invertido en el Teatro Río no está claro y ahora resulta que el Ayuntamiento se va a embarcar en un procedimiento judicial contra Hacienda que nos costará a los ibenses 69.000 Euros en honorarios de abogados (más de lo que nos gastamos en actividades culturales en 2009).
Al tratarse de una cifra tan alta, 700.000 Euros, esta cuestión del IVA puede desequilibrar cualquier cuenta o presupuesto. Cuando se cerró el 2008, el Interventor ya incluyó en la Memoria una advertencia en tal sentido y, posiblemente, por aplicación del principio de prudencia, no se tendría que haber considerado ese activo. El problema que se le habría planteado al equipo de gobierno en ese momento habría sido serio: presentar un resultado contable con pérdidas por un importe aproximado de 1.500.000,00 Euros..
Pero esta cuestión afecta igualmente a los Presupuestos del 2010, que no se acaban de cuadrar porque el círculo tiene difícil cuadratura. Los Presupuestos del 2010 serán tan poco creíbles como los del 2009 o el 2008, pues se suman dos circunstancias negativas: la evolución de los ingresos es negativa (se recauda menos por los tributos municipales) y la reducción del gasto no es suficiente. Os recuerdo que los votos del PP impidieron en su día que prosperase mi moción para que se aprobase un Plan contra la Crisis Económica, presentada en el Pleno de octubre de 2008 y, meses más tarde, el Pleno aprobó unas medidas anticrisis que apenas se han aplicado. Por ejemplo, al Concejal del PP Rafael Pastor se le encomendó gestionar la "central de compras" y tengo la sensación de que no se ha hecho nada en esa parcela.
Para colmo de preocupaciones, está previsto que la Sindicatura de Cuentas lleve a cabo una Auditoría del ejercicio 2008 (así aparece en el Plan de Actuación para 2010 que se ha presentado a Les Corts). Tengo mucho interés en conocer la opinión de los auditores sobre materias como las amortizaciones, o los contratos, o el IVA que mencionaba más arriba. Pero sobre todo, me interesa conocer la opinión de los Auditores sobre la aplicación del principio de devengo, según el cual los gastos deben registrarse en el ejercicio en el que se produce la entrega de bienes, con independencia del momento en el que sean efectivamente pagados.
En mi opinión, la potestad de autoorganización de la Entidad Local recogida en el artículo 4.1a) de la Ley 7/1985 de Bases de Régimen Local permite al equipo de gobierno introducir en las Bases de Ejecución del Presupuesto la obligación de realizar un CONTROL FINANCIERO REAL, bien a cargo de la propia Intervención de la Entidad Local, bien contratando empresas colaboradoras, bien con un sistema mixto. Pero cualquier cosa antes que permitir el desbarajuste que se ha permitido en el Ayuntamiento, y me estoy refiriendo concretamente a todo lo que se ha consentido a Ana Sarabia (de lo que una parte está bajo investigación judicial y otra parte aun no ha salido a la luz porque se ha intentado disimular).
Las cuentas de la Generalitat Valenciana no están mucho mejor y las agencias ha rebajado la calificación crediticia. El crecimiento del desempleo en nuestra Comunidad avanza por encima de la media nacional, mientras que la deuda pública valenciana alcanza los 3.870 euros per cápita, gracias a la política de derroche y grandes eventos del tío Paco Camps.
Las del Estado español siguen siendo preocupantes. Como decía hace unos días, personas de relieve como nuestra Alcaldesa todavía no entienden que el retraso de la recuperación española respecto a Europa, básicamente, se explica por la crisis inmobiliaria de nuestro país, con la práctica desaparición de uno de los motores de la actividad desde 1997, que ha destruido más de 1,5 millones de empleos. No vendría mal que recordásemos las advertencias lanzadas hace años contra la burbuja inmobiliaria, y el débil patrón de crecimiento que el gravísimo exceso de endeudamiento que se estaba generando. Y si las medidas que propone Rajoy son la solución, ¡vamos apañados!
Posiblemente no diga nada nuevo si afirmo que estamos sufriendo a escala local, autonómica y estatal lo que se coció hace años a escala mundial, porque el mundo económico y financiero está totalmente interconectado, tal y como se puede comprobar en la Web Economic Forum, que muestra la interconexión neuronal existente entre los problemas de diversa índole que atacan, o podrían atacar, a la economía mundial. Pulsando una a una se puede ir consultando de forma más específica las interacciones a más bajo nivel. Resulta una forma curiosa e intuitiva de poder seguir la crisis, ésta o venideras. La verdad, acojona un poco tanta posibilidad de que algo vaya mal y desencadene un efecto dominó. Casi que lo raro es que la cosa pueda ir bien…