Revista Cine
Directora: Maya Deren
¿Recuerdan cuando comentaba "Meshes of the afternoon"? Pues bueno, yo pretendía que ese iba a ser el inicio de esta intensiva retrospectiva de Maya Deren, acompañada de una que otra película de corta duración, como la de ayer, "La Jetée", y otras que vendrán en los próximos días -o eso espero-. Aunque no la pude llevar a cabo en aquel entonces, las circunstancias presentes me dan la oportunidad de hacerlo ahora, así que vamos con esta retrospectiva intensiva... Si bien menos polisémica que "Meshes of the afternoon", "At land" comparte muchas similitudes e intenciones con aquella primera obra, las cuales podemos enmarcar en los estrictamente formal o narrativo como en el aspecto más intelectual y personal, algo inevitable para Deren, quien le imprime a sus intrincadas historias un componente tan único que hace de sus obras algo absolutamente meritorio y, en los mejores casos, memorable. "At land" no es la excepción en ningún sentido, claro que no.
Una mujer, Maya Deren, despierta en mitad de la playa y comienza un recorrido que la llevará por multitud de lugares que la conducirán, finalmente, a su destino -oh, pero que incierto yo para dar sinopsis-. ¿Qué significa todo?
Así es, resumir la premisa de los relatos de Deren en un par de líneas es bastante complicado, primero porque uno nunca sabe qué está pasando hasta que los minutos llegan a un punto avanzado, hasta el punto clave de la trama, y segundo, porque una vez "entendido" de qué va el relato en cuestión -en su aspecto más superficial, claro-, pasamos a otro nivel, que es interpretar los hechos atestiguados e interpretar la significación del total o de las partes. La obra de Deren es infinitamente recursiva y en cierta forma circular, y reducir sus relatos a la trama o el final o el desarrollo, sería perderse bastante de lo bueno e importante, sería eludir la esencia misma.
Por ahora, dejemos la interpretación para el final, e incluso eso lo dejaré a medias, pues qué importa lo que yo entienda del relato toda vez que la directora quiso decir una cosa y el resto de espectadores pueden interpretar otra distinta. Lo importante de "At land" es que nos permite ir entendiendo por dónde van las inquietudes narrativas y psicológicas de Maya Deren, inquietudes que configuran las claves de su cine y que poblarán cada trabajo posterior suyo que iremos viendo en este blog. La más notoria de esas claves es el fundir espacios, por ejemplo, que Deren camine por la playa y se encuentre con un árbol que comienza a escalar, el cual la lleva a una mesa en la que cenan un grupo de adinerados ejemplares humanos, mesa por la que Deren se arrastra sin que nadie la tome en cuenta, para que al llegar al final un objeto caiga, pero no al suelo, sino río abajo a la playa misma, donde continúa su recorrido, ahora transformado en una incesante y urgente búsqueda vital -entre medio, Deren pasa por un bosque, una plantación y la casa de un moribundo-. Esto es importante por dos cosas: la primera, porque es un leit motiv estético-narrativo, el unir multitud de espacios en uno solo a través del montaje y los objetos en pantalla; la segunda, porque vendría a decir que todo este gran espacio compuesto por pequeños múltiples espacios podría ser, en realidad, algo abstracto, ya saben, la mente de quien pasa de un recuerdo a otro así como sí nada...
El punto es que Maya Deren encuentra en su lenguaje un vehículo que representa fiel y potentemente sus ideas, y eso, amigos míos, es cine; por lo demás, que sea capaz de introducir al espectador en este extraño recorrido y envolverlo en la maraña de sensaciones que provoca, es prueba de que lo que esta mujer hace es, efectivamente, cine. Quizás de poca duración, quizás de bajo y humilde perfil, quizás no convencional ni tipo, quizás un poco difícil para los perezosos, pero cine al fin y al cabo: verdadera experimentación -y no los disparates mentales de algunos que ganan inmerecida fama por su mal llamado "cine experimental", que no es más que un cúmulo de sinsentidos sin coherencia alguna-.
Creo, ahora sí, que ahondar en el sentido metafórico de "At land" es banal e inútil porque ya se vio que Maya Deren, efectivamente, tiene algo que decir y que sabe decirlo con admirable habilidad cinematográfica, pero en fin, que no lo puedo evitar: yo pienso que "At land" es el viaje espiritual de una mujer ahogada, quien intenta encontrar la pieza clave de su liberación, de su paz. Recorrer su memoria, ambigua y confusa y contrastada, es lo que debe hacer con tal de hallar su ansiada libertad. O es eso, o es una metáfora de las luchas de una mujer que quiere encontrar su propia identidad, que es lo que Maya Deren ha expresado en entrevistas. También dijo lo mismo sobre "Meshes of the afternoon", la cual ya se dijo que comparte varios elementos narrativos y conceptuales con "At land", y sobre la que interpreté algo más o menos similar: que era el viaje por la locura de una mujer celosa o lo que sea...
En fin, interpreten ustedes, miren que por quince minutos de sus vidas... Qué esperan...