Ilustración de musicaconmiopia.com
Hace cuatro años el inolvidable y asombroso cortometraje de animación La dama y la muerte se quedó a las puertas del Premio Oscar. Entonces comenzó a sonar con fuerza el nombre de su productor, Raúl García, quien un año antes, en 2008, había obtenido un Goya como codirector del largometraje El lince perdido. Su talento cinematográfico tampoco dejó indiferente el año pasado cuando su cortometraje La caída de la casa Usher figuró entre los diez finalistas a la estatuilla dorada.Este año, el productor y cineasta vuelve a intentarlo con La verdad en el caso de Monsieur Valdemar, que se proyectó el pasado fin de semana en Los Ángeles a los miembros del comité de la Academia de Hollywood que realiza el primer filtro hacia el Oscar de corto animado.Entre los corrillos cinematográficos de antesala de los premios, típicos de estas fechas de inicio de quinielas, ya corre como la pólvora la gran calidad de este cortometraje, una coproducción entre España, Luxemburgo, Estados Unidos, Francia y Bélgica, que adapta la narración homónima de Edgar Allan Poe, de 1845. La obra dura trece minutos, está narrada por el intérprete británico Julian Sands y cuenta la historia del Doctor P. y su obsesión por el hipnotismo y su efecto en el momento de la muerte.A continuación os dejamos el cortometraje La dama y la muerte, con el que Raúl García ya consiguió renombre entre las difíciles salas de Hollywood: