No podía ocurrir de otra forma. De nuevo, el festival Interestelar fue un cúmulo de buenas experiencias y buen hacer. Desde la organización del festival hasta la actuación de los artistas, no había más que mirar la cara de los asistentes para darse cuenta de que el público se lo estaba pasando en grande.
Unos días marcados por el calor sofocante de Sevilla en mayo, como les tocó sufrir a los artistas que abrieron las jornadas, con el público observando desde las sombras, como fue el caso el sábado de Corizonas, VEINTIUNO o los sevillanos Genérica y Quentin Gas & Los Zíngaros. Sin embargo, las altas temperaturas no hicieron que la fiesta decayera y las bandas lo dieron absolutamente todo en el escenario, demostrando cómo se debe dar un espectáculo, cómo se anima al público y que nada puede con la música. Ni siquiera el monzón en Sevilla.
Vivimos actuaciones para todos los gustos, desde el rock más clásico, con Loquillo, hasta las actuaciones más canallas como las de Les Castizos, poniendo on fire al público cerrando la primera jornada del festival.
Pero en orden, del primer día queremos destacar como no podía ser de otra forma el buen rollazo del bolo de Carlos Sadness, entre las que no faltó “Bikini”, “Qué electricidad” o “No vuelvas a Japón”. Sí, en esta última todos esperábamos la colaboración de Santi Balmes, pero nunca llegó.
Los vientos del este nos trajeron al señor Loquillo, grande donde los hayas y esperado por muchos para cantar a viva voz “Feo, fuerte y formal”, “Salud y Rock and Roll” y “Cadillac solitario”, entre otras muchísimas que el público coreó demostrando que el rock nunca muere.
Uno de los platos fuertes del festival era, sin duda, Love of Lesbian. Los nervios se palpaban entre los fans, las camisetas de “John Boy” y “1999” aparecían entre los allí congregados y la fiesta comenzaba con “Cuando no me ves”. Inundado de luces rojas los vimos interpretar “Bajo el volcán”, presentando así su disco “El poeta Halley”. No faltó “I.M.T.” que tanto entusiasma al público o “Planeador”. Sin embargo, no se olvidó tampoco de sus míticas canciones que hacen vibrar a todo el mundo, como “Allí donde solíamos gritar”, “Belice” o “Club de fans de John Boy” seguida de “Me amo”. Un espectáculo que hizo reír y llorar a muchos y que fue el principio del fin de muchas gargantas.
Vivimos intensamente el carácter sobre el escenario de León Benavente, inigualable y con un público contentísimo porque “es un crack”, como bien vociferaban al lado nuestra los fans.
La fiesta iba llegando al fina con actuaciones como las de “WAS” o “Les castizos”, justo ese punto de la noche en el que deseas que sea eterna o que la puedas repetir en bucle. Un broche de oro, divertido y espectacular.
Del día siguiente, un sábado ardiente y espectacular, vimos bien temprano a “VEINTIUNO”, con un público fiel aguantando las bolas de fuego que caían en el campo del Centro Andaluz de Arte Contemporáneo, ellos, en respuesta, dieron la cara con canciones como “Llama y Gasolina”, “Me gustaría” o “Los santos imprudentes”, haciendo un repaso por discos anteriores y por el último lanzado, “Grandes Felinos”.
Desde Sevilla y presentando “Caravana” llegaron Quentin Gas & Los Zíngaros, los cuales aparte de soportar las altas temperaturas como el grupo anterior, no perdieron las ganas de bromear con “Do it for your lover”, haciendo una fiel interpretación del tema eurovisivo.
Corizonas intentaron por activa y por pasiva animar al público para que se acercara al escenario en vez de estar refugiados bajo los árboles y carpas. Y poco a poco lo fueron consiguiendo, viendo que cada vez eran más los congregados en la pista. Herencia que tomaron los chicos de L.A., Second y La Habitación Roja, acompañados además del descenso del sol que hizo que el público estuviera más excitado por la noche que se acercaba.
Todos esperaban a los también sevillanos Maga, que venían presentando “Salto Horizontal”. Un concierto emocionante en el que el público pudo disfrutar de “Por las tardes en el frío de las tiendas” o “Agosto esquimal”.
Y seguimos con las emociones fuertes con los míticos Los Planetas, que no dejaron atrás temas como “Islamabad”, “Porque me lo digas tú” o “Seguiriya de los 107 faunos”. Un espectáculo auditivo para todos los fans en los que se dibujaba la felicidad en la cara.
Pero si algo estaba todo el mundo esperando con anhelo y nervios, esa era la espectacular Fangoria. Llegando casi al final de la segunda jornada apareció la diva de la movida madrileña enfundada en lentejuelas y con un ritmo de infarto. Abrió paso a la gran fiesta con “Rey del glam”. Nos vinimos muy arriba con “Ni tú ni nadie” o con “Disco Sally”. Llegamos a “Espectacular”, “Dramas y comedias”, con un público que casi tapaba la voz de Alaska y llegamos al éxtasis con “A quién le importa” seguida de “Fiesta en el infierno”. Un glorioso espectáculo en el que nadie pudo decir que no lo había disfrutado, porque ya fuera por la fuerza de Alaska, el alcance de sus grandes éxitos o por simplemente dejarse llevar por la euforia del grupo, no hubo una sola persona allí que no bailara.
Mientras tanto, en la Carpa Obbio estaba empezando la fiesta alternativa de la mano de La Rubia Pincha, a la que no le faltó público a pesar de tener tocando al lado a la mismísima Alaska. La pista de baile estaba concurrida mientras ella ponía temazo tras temazo que la gente no dejó de bailar y disfrutar.
Y se acababa todo con Elyellas DJS, dando una lección de cómo poner el punto y final a un estupendo festival que regresará en una nueva edición el año que viene.
Un festival que a muchos se nos quedó corto, que pasó volando después de haberlo esperado tanto y que quedó retratado de la mano de increíbles ilustradores que nos acompañaron durante las dos jornadas. Y así, con este buen sabor de boca, volveremos a esperar.