ATLÁNTIDA FILM FEST | Crítica de “No One’s Child” de Vuk Rsumovic

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Sección Atlas
Título original: Nicije Dete. Director: Vuk Rsumovic. Guión: Vuk Rsumovic.
Reparto: Denis Muric, Pavle Cemerikic, Milos Timotijevic.
Nacionalidad: Serbia. Año: 2014. Género: Drama.
Premios:
Mejor Película, Guión, FIPRESCI, Semana de la Crítica – Festival de Venecia
Valoración: 8
Aquí puedes ver la película en el AFF de Filmin

“No One’s Child” es la ópera prima de Vuk Rsumovic, donde nos cuenta la desgarradora historia de un niño salvaje que vivía entre lobos, encontrado en 1988 en las profundidades de las montañas bosnias, sin familia ni señales de civilización, basado en hechos verídicos.

Haris Pucurica (Denis Muric), nombre otorgado al azar, es encontrado viviendo en un bosque junto a unos lobos y será enviado a un orfanato de Belgrado. En el orfanato se hará amigo del carismático Zika (Pavle Cemerikic), el cual protegerá y enseñará a desarrollar sus habilidades sociales.

“No One’s Child” nos la presentan como un descendiente directo de “El pequeño salvaje” de Truffaut. A través de un relato desgarrador, se entrevé una crítica social hacia el abandono infantil, chicos con familia que están en orfanatos o chicos abandonados en un bosque a su suerte, por la guerra o simplemente por no querer tenerlo. Rsumovic nos ofrece a través de una estructura bien definida una visión perturbadora del futuro de Puka, apodado por su amigo Zika, metafóricamente enlazado con la historia de Yugoslavia.

Sinceramente este tipo de películas son bastante duras a nivel emocional. El contexto ya de por sí es duro, un niño sin habilidades sociales, abandonado a su suerte con los lobos, que no entiende nada de su alrededor, todo lo ve como una amenaza y unos adultos que intentan adoctrinar como buenamente pueden, pues es difícil, ya que te pones de parte del protagonista y ves que no entiende lo que ocurre a su alrededor. Además si le sumas que están en un orfanato, el abandono al que están expuestos estos niños, el contraste entre ellos y el protagonista, civilización y naturaleza, pues se hace más cuesta arriba. Pero esto no es todo, ya que están en mitad de una guerra, una situación bastante tensa que iremos viendo en los distintos saltos de tiempo pues es desmoralizante. Todo ello sin meternos demasiado en la trama en sí, ya que tiene momentos muy duros, pérdidas y mucho dramatismo.

Es una historia difícil, sí, pero creo que su visionado es muy recomendable, ya que aunque apenas toca el contexto bélico, la situación, ambientación y pequeños detalles que van ocurriendo en la trama, centran la película en la crítica y desmoralización europea de aquellas fechas. Para mí, una de las mejores películas de la sección atlas y una ópera prima de Vuk Rsumovic muy buena.

Crítica: María José Díaz-Maroto