El turquesa y el rojo son colores que contrastan. El turquesa es relajado para una habitación porque puede ser tranquilizador y calmante a la hora de dormir. De manera inversa, el rojo es un color audaz que representa energía. La mejor opción para decorar una habitación es usar turquesa como el color principal, como en las paredes, y usar el rojo para dar toques de color o usarlo en una pared de acento.