En Augusta, como en el universo y según la filosofía oriental, el Ying y el yang describen las dos fuerzas fundamentales aparentemente opuestas y complementarias, que se encuentran en todas las cosas. Tiger vs Mickelson podría ser un claro ejemplo. El primero apartado temporalmente del Golf por sus escándalos personales, regresa y no gana. El segundo, Mickelson, apartado también temporalmente por la enfermedad de su esposa para estar a su lado, vuelve y gana su tercera chaqueta verde.
En el Hoyo 18 Tiger llega con unas gafas negras poco habituales en su vestuario habitual y enfadado con su juego, pese a hacer un cuarto puesto digno de elogio. Mickelson, el caballero de la eterna sonrisa llega concentrado pero sonriente y solo llora, de verdad, lágrimas que muestran las cámaras al abrazar a su esposa después de apuntarse el último berdie.
Desde un punto de vista filosófico, incluso religioso, ahora que Tiger ha vuelto a retomar el budismo diariase que el bien gana al mal. En la hipócrita sociedad americana, no seria extraño encontrar un análisis del Masters de augusta muy parecido al que traigo al Blog. En España las cosas se han visto quizá de una manera menos personal y más profesional. Mickelson ha ganado por méritos propios sin necesitar de mérito alguno de sus contrincantes y en particular de Tiger Woods. Impecable e implacable comenzó y termino el Masters el campeón, es cierto que tanto dentro como fuera del campo de golf. Maniqueísmos a parte si alguien puede hacer peligrar el número uno de Tiger ese es Phil Mickelson. Golf en estado puro, pasen y vean…
Esta entrada fue enviada el a Lunes,12 Abril 2010 a las 5:37 pm y está archivada en . Puedes seguir los comentarios a traves del fedd RSS 2.0 . Puedes dejar una respuesta, o hacer trackback desde tu web.