Revista Tecnología
Microsoft puede desbloquear un potencial extra del poder de procesamiento de la GPU de Xbox One para que los desarrolladores la usen a su favor.
Según ha explicado Eurogamer, hay un 10% de este procesamiento que se destina a Kinect y aplicaciones dejando 1,18 teraflops para juegos en lugar de los 1,31 originales.
A través de actualizaciones la compañía puede ofrecer este 10% que se pierde.