Julio César Colmenares.
Sin duda alguna que nuestro presidente Socialista dejo bien parado al país y acertó un gran golpe al imperio y sus filiales con su discurso por lo más sincero, contundente y directo. En 30 minuto abordó tantos temas que dejo a todo el mundo con los ojos claros y sin luz. Vi su intervención 5 veces seguidas para comprender y analizar cada una de sus palabras y ciertamente que tuvo toda la razón del mundo, con una dignidad patriótica inmensa, con un fuego revolucionario que arropó aún a nuestros hermanos sureños. Aún huele azufre en la asamblea de naciones unidas, si miramos completo el escenario no estaba pleno como cuando el dictador Obama tuvo su intervención porque se da una muestra de cuántos países lacayos del imperio aún subsisten, movidos y chateados con la economía verde del dolar. Si comparamos el discurso de Nicolás y el de Obama la diferencia es abismal como es abismal la relación y contacto de Obama con el pueblo que lo eligió. Obama en telepronter con esos escritos de frases comunes, fríos, distantes e hipócritas, siempre adornados con esas palabras de democracia, patria, libertad que ya nadie les cree. Mientras Maduro habló desde su corazón, con una alta moral, hablando con verdad teniendo los pelos del burro en sus manos. Recordar a nuestro eterno Comandante Chávez cuando sacudió el recinto y el mundo con su HUELE AZUFRE esa rebeldía y sinceridad que siempre le caracterizó, ahora su hijo una vez más le roncó duro al imperio, puso los puntos sobre las i, fue tajante y duro contra las potencias militares, señaló sin pelos en la lengua los creadores de ese monstruo terrorista que est{a llevando la miseria, el dolor y la muerte en el Oriente Medio. No le tembló el pulso para señalar de hipócritas al gobierno de los Estados Unidos con respecto a los Derechos Humanos manteniendo presos políticos por décadas, igualmente con respecto al Cambio climático y a la voracidad económica en nuestros pueblos. Maduro coherente y solidario con los pueblos más atacados por el capitalismo salvaje como lo es Cuba, Puerto Rico, Venezuela entre otros. Allí en una energía revolucionaria de que tanto temen el los Estados Unidos que motiva a derrochar millones de dolares en querer acabar con la revolución Bolivariana. Este discurso debe ser analizado con mucha seriedad porque es el legado de Chávez, su pensamiento y acción que heredamos y que tenemos que defender a cuesta de todo. Lamento de los hermanos revolucionarios que se la pasan cuestionando como la oposición todo lo que este humilde obrero impulsa en el país porque no se dan cuenta que Maduro se ha crecido, ha madurado bastante como político y analista nacional e internacional. Chávez no se equivocó al recomendarlo como el primer presidente chavista y a igual que en 14 años hice de no levantar banderas contra Chávez y el proceso bolivariano lo hago con mucha pasión por Nicolás Maduro y el proceso y esto sin ánimo de prebendas porque de verdad aún no tengo los grandes beneficios como la Misión Vivienda porque yo no soy oportunista que me muevo en apoyo a un partido, gobierno y proceso a ver qué me dan ya que no soy adeco como cultura heredada de la Cuarta República. Sé que este discurso le va a salir caro a Nicolás, el imperio no se quedará con las manos atadas, seguirán aún con más ahinco seguir arremetiendo contra nuestro país pero debemos unir filas, estar cada día más conscientes del momento histórico que vivimos, no dejarse seducir por las injustas criticas y las mal intencionadas acciones que solo busca dividir porque hay muchos por allí que piensan que la revolución está consolidada y hay que salir de unos para ellos montarse en el poder. Desestiman al enemigo que está a la caza de toda oportunidad que se presente para debilitar el proceso como lo han buscado con la guerra económica y psicológica. Comunicador alternativo.[email protected]