La Junta Central Electoral (JCE) tuvo que sacar de servicio este miércoles, por varias horas, el ascensor ejecutivo destinado a sus máximas autoridades y visitas distinguidas, debido al mal olor que produjo una funda con heces fecales que al parecer fue colocada a propósito en el elevador.
Ese era el tema que se comentaba entre muchos empleados de la Junta en las primeras horas de la mañana y hasta hubo quienes decían “pero eso pudo ser un atentado”.
La situación obligó a dos de los miembros de la JCE y otros ejecutivos del organismo a usar la escalera para subir a sus oficinas ubicadas en el tercer y segundo piso de la sede central.
A algunos visitantes se les informó que el ascensor estaba dañado, cuando realmente estaba fuera de uso hasta que se despejara el mal olor a heces.
Al parecer alguien colocó, como un acto premeditado, la funda con materia fecal en el ascensor exclusivo de la JCE.