La Semana Santa está a la vuelta de la esquina. Si se repiten las cifras de años anteriores de la DGT, se podrían producir más de 15 millones de desplazamientos por carretera durante las que serán las primeras grandes vacaciones del año. Y es que el coche es uno de los medios de transporte preferidos para hacer una escapada en esta época.
En la mayoría de las ocasiones, viajar en coche supone recorrer varios cientos de kilómetros, cargar el doble de peso, sufrir las consecuencias de los atascos y todo ello pone a prueba la resistencia de los vehículos, exigiéndoles un mayor esfuerzo y rendimiento. Por esta razón, antes de salir a la carretera conviene asegurarse de que el coche se encuentra en plena forma.
Desde Autingo (www.autingo.es), la primera plataforma para calcular el presupuesto de las revisiones y reparaciones del coche y reservar cita online en talleres de toda España, advierten de la importancia de revisar muy bien los puntos clave del coche los días previos a emprender cualquier viaje. Pero solo tres de cada diez conductores lo hace, según una encuesta realizada por la compañía a sus usuarios. “Realizar un chequeo completo al vehículo y comprobar que nada falla es primordial. De esta manera se garantiza una mayor seguridad para todos los que viajan en el coche, se pueden prevenir disgustos y accidentes en la carretera, reducir sus consecuencias y evitar otros imprevistos que puedan amargar las vacaciones”, señalan desde la compañía.
Desde Autingo proponen una serie de consejos básicos para tener el coche a punto y que éste no arruine los merecidos días de descanso:
Revisar el aceite y el anticongelante: Con solo levantar el capó se puede comprobar fácilmente si la cantidad de lubricante y líquido refrigerante es suficiente, si no fuera así se podrían provocar graves daños al motor que arruinarían el coche. Basta con revisar que ambos niveles estén entre las señales de mínimo y máximo, siempre con el coche parado, en horizontal y en frío. Si hace falta rellenarlo y se tiene un poco de pericia, puede hacerlo uno mismo. Si no es el caso, lo mejor es acudir a un especialista.
Probar los frenos: que estén en perfecto estado es importante para viajar con seguridad. Para hacer una prueba de que todo va bien es necesario poner en marcha el vehículo y circular a distintas velocidades y probar los frenos, si se detectan ruidos extraños o que la calidad de frenado no es óptima, lo mejor es acudir al taller para que lo revisen y comprueben qué está fallando.
Chequear las luces, batería y sistemas eléctricos: las luces ayudan a iluminar el camino pero también que otros conductores puedan ver su presencia en la carretera. Basta con probar a encender todas las luces del vehículo, incluido los intermitentes. Si hubiese algún faro fundido, hay que sustituirlos. Asimismo, resulta importante comprobar que la batería funcione correctamente y no dé problemas, llevar unas pinzas en el maletero por lo que pueda pasar y evaluar que el sistema eléctrico, elevalunas, etc. está en buen estado.
Comprobar el estado de los neumáticos: Hay que revisar que la profundidad del dibujo no sea inferior a 1,6 milímetros y que la presión de aire sea la adecuada y especificada por los fabricantes. Si la presión está alta se desgasta la goma solo por el centro y reduce la capacidad de agarre al asfalto. Si fuera baja, la superficie de contacto es mayor y esto desgasta más el neumático y eleva la distancia de frenado. Por último, prestar especial atención a grietas o a abultamientos extraños. Entonces sí sería necesario cambiar esos neumáticos.
Revisar los limpiaparabrisas y elementos de seguridad. Son unos de los grandes olvidados al realizar una revisión rápida del vehículo, pero son igual de importantes en el viaje. Sobre los limpiaparabrisas, las escobillas se desgastan y hay que cambiarlas para que sigan ejerciendo su función adecuadamente. Además, muchos olvidan revisar el depósito del agua del limpiaparabrisas y luego no tienen con qué limpiar sus cristales. Por otro lado, se da por hecho que los airbags y cinturones funcionan, pero no está de más comprobar que nada falla en ellos, que los airbags no estén desactivados y que el sistema de enganche y bloqueo de los cinturones funciona bien. De su buen funcionamiento depende la vida y seguridad en caso de accidente.
Acudir a talleres y profesionales de confianza: Desde Autingo recuerdan que lo ideal siempre es realizar una puesta a punto en talleres profesionales y con licencia. Esas revisiones de mantenimiento incluyen desde la comprobación de los distintos niveles del vehículo y su sustitución y la revisión de hasta 12 puntos del coche. A través de la web o app de Autingo se puede calcular el coste de dicha intervención y obtener un único presupuesto cerrado, para a continuación reservar cita online en talleres de confianza de toda España. Para facilitar esa tarea, la compañía ha lanzado tres paquetes especiales para realizar una revisión de mantenimiento. Estos son el mantenimiento básico por 69 euros que incluye aceite y cambio de filtro; mantenimiento completo por 109 euros que además del aceite incluye cambio de filtros de aire, combustible y habitáculo; y por último mantenimiento oficial que incluye todo lo anterior y hasta 12 puntos de control, y su precio depende el modelo y kilometraje del vehículo.
Por último, Autingo añade que no hay que olvidarse de llevar los triángulos y chalecos reflectantes dentro del coche y que antes de salir hay que comprobar tanto el estado de las carreteras, como la situación meteorológica e ir equipados con todo lo necesario de ropa, comida y otros enseres para los posibles imprevistos que puedan surgir.