Si hay palabras que podemos leer y escuchar todos los días, la que se “lleva las palmas” es “líder”, y todos sus derivados: liderazgo, liderar, etc.
Mi interpretación es que algo así nos está mostrando que rápidamente, necesitamos saber con exactitud, de qué estamos hablando cuando hablamos de “Líder”.
Esto además, representa peligros de “manoseo” de la palabra… Sobre todo, cuando se aplica como una forma moderna de decir “jefe”, o para mostrar que “sabemos” que es mejor ser líder que jefe.
En una observación rápida y generalizada –que no es recomendable-, te diría que hoy, todo el mundo es líder.
¿Comenzamos por el significado?
Líder proviene de leader, en inglés, que significa “conductor”.
¿Te das cuenta de que hasta aquí, no es nada claro, lo que es un líder?
El líder, ¿es simplemente un conductor? ¿El que guía o dirige hacia un lugar (R.A.E.)?
Puede ser.
La clave que clarifica el sentido más profundo es cómo lo hace.
El liderazgo es el proceso infinito de enseñar a las personas cómo aprender, dejándolas aplicar…
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El liderazgo es el proceso infinito de enseñar a las personas como aprender, dejándolas aplicar su aprendizaje, aprendiendo de su aplicación, y entonces enseñar, aprender y enseñar de nuevo. Seguir leyendo
Hago hincapié en las palabras “enseñar a las personas cómo aprender” porque creo que son las más importantes. A partir de ahí, creo que poco se puede enseñar porque cuando una persona ha aprendido a aprender, ya puede continuar sola su proceso y camino. Y ese es el punto donde podemos comenzar a auto-liderarnos.
Auto-liderazgo se refiere a liderarnos a nosotros mismos y esto no tiene nada que ver con aparecer firmes y seguros, tener opiniones estáticas o predicar nuestras convicciones.
Auto liderarnos es un logro que se realiza cuando hemos atravesado nuestro propio proceso personal y transformacional.
Cada uno de nosotros reconoce en sí mismo, aspectos que necesita mejorar, cambiar y transformar. Cuando no se realizan esos procesos, No Podemos Liderar a los demás. No podemos transformarnos en Líderes.
Los líderes efectivos no son predicadores, son hacedores. Peter Drucker
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Los líderes efectivos no son predicadores, son hacedores. Peter Drucker
Si vos “sabés” muchas cosas, hablás de ellas, tenés un 10 en teoría sobre el liderazgo, pero en el momento de actuar, sos incoherente con lo que decís, no podés aplicar tus propias palabras, tu “liderazgo” es vacío y hueco.
Verdaderos líderes son aquellos que lideran con el ejemplo antes que con la intimidación. El…
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Verdaderos líderes son aquellos que lideran con el ejemplo antes que con la intimidación.
El punto del liderazgo es tener poder con la gente, no señorear frente a ellos. Donna Karlin
Y ese poder no proviene del cargo o del autoritarismo, proviene de su forma de accionar, y su forma de accionar proviene de su formación como persona, la que hace posible, su formación profesional.
El liderazgo es una acción no una posición. Donald H. McGannon
¿Podés hacer coincidir tu acción profesional con tu acción personal?
¿Son los mismos, los valores que subyacen en estos dos ámbitos tuyos?
O por el contrario…
¿Hay acciones que no podés ejecutar en el ámbito personal y que tratás de imponer en tu ámbito profesional?
¿Qué creencias subsisten en tu forma de liderar?
¿Querés enterarte de en qué lugar te encontrás respecto de tu liderazgo personal?
¿Tratás de impulsar a tu gente pero en tu vida personal no sos proactivo?
Ser proactivo es el primero de los Hábitos de la Victoria Privada y consiste en dos acciones muy importantes, que se contienen una a otra:
Tomar la iniciativa, en las cosas que te importan, sin creencias ni prejuicios ni estar pendiente de qué harían los demás en tu caso.
Decidir cómo vas a responder a lo que llega a vos sin dejarte influenciar ni por la manera del otro, ni por lo que te diga, ni por la gravedad de la situación.
Y te dije que estas acciones están contenidas una en otra porque tomar la iniciativa implica estar eligiendo tu propia respuesta a personas y situaciones.
Los resultados de nuestra vida están determinados en lo fundamental por nuestra respuesta a cada…
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Los resultados de nuestra vida están determinados en lo fundamental por nuestra respuesta a cada acontecimiento. ¿Elegimos ser héroes o víctimas en nuestros dramas vitales?
¿Enseñás a tu gente a trabajar con metas pero vos no tenés la tuya personal?
¿Cómo les transmitís la importancia de tener metas?
¿Le pedís que construyan su visión y descubran su misión pero vos no tenés las tuyas?
Mucho más importante que lo que hicimos y por qué, es lo que estamos haciendo y para qué. Renny Yagosesky
¿Pretendés que tu gente sea efectiva (eficiente y eficaz, a la vez) pero vos no sabés distinguir entre lo urgente y lo importante?
La persona sabia hace primero aquello que la tonta hace último. Ambas hacen lo mismo, solo en…
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La persona sabia hace primero aquello que la tonta hace último.
Ambas hacen lo mismo, solo que en diferentes momentos.
Baltasar Gracián
De mi libro: Mirada Desde El Coaching Sobre Los Siete Hábitos De La Gente Altamente Efectiva
Los seres humanos actuamos como Personas (máscaras), y lo hacemos de diferentes formas en los ámbitos de nuestra vida, por ejemplo: personal y laboral, pero… Nuestra esencia es la misma, la constitución de nuestro Ser lo es, por eso…
Si tu liderazgo profesional no está funcionando, no busques aprender técnicas, no imites a los demás, no estudies intrincados tratados sobre el tema.
La respuesta es mucho más fácil de encontrar.
¡Transformate primero en el Ser que querés Ser a nivel personal!
¡Recién ahí, podrás ser ese Ser en tu ámbito profesional!
Se explica la anécdota de que una madre llevó a su hijo de seis años a casa de Mahatma Gandhi. Ella le suplicó:
- Se lo ruego, Mahatma, dígale a mi hijo que no coma más azúcar, es diabético y arriesga su vida haciéndolo. A mí ya no me hace caso y sufro por él.
Gandhi reflexionó y dijo:
- Lo siento señora. Ahora no puedo hacerlo. Traiga a su hijo dentro de quince días.
Sorprendida la mujer dio las gracias y le prometió que haría lo que le había pedido. Quince días después, volvió con su hijo. Gandhi miró al muchacho a los ojos y le dijo:
- Chico, deja de comer azúcar.
Agradecida, pero extrañada, la madre preguntó:
- ¿Por qué me pidió que lo trajera dos semanas después? Podía haberle dicho lo mismo la primera vez.
Gandhi respondió:
¿Qué respondió Gandhi?
Tratá de dar una respuesta. No hagas trampa. No mires más abajo.
De acuerdo a lo que te propongo en mi post, ¿qué te parece que le pasaba a Gandhi que quince días antes, no pudo responder, y en este momento, sí?
Gandhi respondió:
- Hace quince días, yo comía azúcar.
Por el placer de compartir