Hola, ¿Cómo has estado? ¿Yo? Desde que partiste nada es igual, todo es como una montaña rusa de la cual no puedo bajarme. Unos días son nublados, otros días son soleados. Unos días sonrío, otros ni siquiera tengo ánimos de salir de la cama.
Sabías que te estabas yendo pero no avisaste, no sé si fue porque no podías o simplemente no quisiste. Fue sorpresivo e inimaginable. Sé que he dicho mentiras pero me gusta creerlas, porque así logró captar algo de atención. Nunca hubo compenetración ni siquiera aquella promesa y aun cuando afirmé que existía, no sirvió en absoluto.
He aprendido tanto por ti y de ti que no sé en qué punto de mi recorrido me perdí. No vi dirección ni recibí orientación sólo presión y ahora me ahogo en los 'Si hubiera'. Es terrible no tener a quién acudir por palabras sanas, objetividad había en tus acciones y pensamientos, pero te fuiste.
Normalmente entro en una habitación sin puerta ni ventanas, salgo sin querer salir, entro sin querer entrar, camino sin caminar, solo inercia. Escucho sin oír, hablo sin cuerdas, actúo porque sí. Es enfermizo estar así, permanecer en un vagón de la atracción de manera fija, como si fueras parte de ella, como si fueras su raíz.
En estos instantes, el estar y ser son una melodía agridulce. Sólo espero que en un buen momento el cocinero le dé un poco de miel y salve este plato principal.
Atentamente: Morelia.
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ISBN: 1605087460687
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