A pesar de que ayer mismo os anunciaba que empezaba con un nuevo Ritmo Caribeño de publicaciones, me parecía importante empezar rompiendo las reglas para difundir un mensaje muy importante de la mano del blog Cosmetik (enlace) y de la marca Avène (enlace).
Y es que precisamente hoy, 13 de Junio, a una escasa semana de empezar oficialmente el verano y la temporada playera se celebra el Día Europeo de la Prevención del Cáncer de Piel.
Imagen de Saludysol.com
Como todas sabéis, el empleo de protección solar ayuda a evitar los efectos de la sobreexposición al sol, tales como las quemaduras, irritaciones y descamaciones. Además, una adecuada protección solar reduce el riesgo de padecer cáncer de piel y, por ello, es una medida que de debe adoptarse siempre por razones de salud.
Aparte de todo esto, la protección solar también ayuda notablemente a prevenir los signos más visibles de la edad, como arrugas marcadas y manchas oscuras o irregularidades en la pigmentación, por lo que, si no es la cautela la que nos empuja a usarla al menos deberíamos escuchar la voz de la vanidad en este asunto.
Personalmente, no soy una persona que se exponga demasiado a los rayos del sol puesto que no me gusta mucho ir a la playa (especialmente en verano) por aquello de que hace calor, la arena se me pega al cuerpo y a los diez minutos de aposentar la toalla ya estoy más que aburrida. Sin embargo, tenemos una asombrosa tendencia a pensar que el sol solo es malo cuando nos pilla en horizontal a la vera del mar, sin plantearnos que una buena sesión se terraza sin sombrilla puede dar el mismo resultado de antebrazos y escotes achicharrados.
Por ello, mi consejo es habituarse a emplear la protección solar de manera regular como parte normal de nuestra rutina cosmética. Así, yo todos los días del año empleo protección solar en la cara, SPF30 en invierno gracias a mis BB creams más habituales y SPF50 en cuanto noto que empieza a hacer más calor. De la misma manera, en las pocas ocasiones en las que expongo mis extremidades a los rayos del Astro Rey suelo aplicarme antes de salir en casa una pequeña dosis de protección solar (nunca menor de 30) haciendo especial hincapié en la zona de los hombros y el escote que es la más expuesta cuando se sale a hacer ejercicio.
Ciertamente, una vez que uno se acostumbra a realizar determinados gestos cosméticos, hasta la rutina más tediosa deja de hacerse pesada, y lo que antes se podían asumir como inconvenientes ahora dejan de serlo. Además, hay que tener en cuenta que hoy en día el mercado cosmético ha avanzado muchísimo y que se están fabricando unos productos estupendos para facilitar el empleo y la normalización de la protección solar.
Así, varios de los grandes inconvenientes de las cremas de alta protección como eran los brillos, la sensación de llevar una película blanca pegada a la cara o la contraindicación que podían tener ciertos productos para las pieles grasas y de tendencia acnéica son hoy cosa del pasado. Uno de los mejores ejemplos (al menos de los que yo he probado) es la Emulsión 50+ de Avéne, que además de cuidar los anteriormente mencionados aspectos es hipoalergénica y no comedogénica.
El producto en cuestión es un ligero fluido con un aroma muy agradable y que viene en un envase con dispensador que lo hace muy higiénico y cómodo de transportar. En cuanto a la sensación en el rostro, hay que decir que no se nota nada grasiento ya que según nos indica la marca es libre de aceites ni tampoco deja aspecto blanquecino o brillante una vez extendido y absorbido. De hecho, el producto al aposentarse tiene lo que se podría denominar como "Toque seco" que hace que la piel quede lisa sin notarse pegajosa, es decir, nada de problemas de pelos que se te pegan a la frente ni de manos que no pueden acariciar.
Además, al no ser un producto grasiento no estimula la producción del sudor, que era uno de los grandes problemas que se le podían achacar anteriormente a los productos solares (sobre todo si como yo sois de las que se ponen a sudar con sólo pensar en el sol). Así mismo, aunque Avène tiene otros productos más específicos para ello, creo que es un producto que se puede combinar muy bien con el maquillaje, especialmente si es de tipo más ligero o en polvo como suelen ser las fórmulas para verano.
Como veis ya las excusas para no emplear protección solar son pocas y yo, por mi parte, os animo a aquellas que ya estáis concienciadas a difundir este mensaje de prevención. En mi caso, lo que voy a hacer es compartir una de las dos Emulsiones que me mandaron desde Cosmetik con mi madre, una de las personas que más quiero en este mundo, y que es usuaria de este producto desde hace bastante tiempo. La otra, lógicamente, me la quedo yo que me viene de perlas.
Me gustaría despedirme por hoy agradeciendo a Cosmetik Blog y a Avène los productos enviados y animándoos a todas a que participéis en la campaña #saludysol (enlace) y regaléis un bote de protección solar a aquellos que más queráis para disfrutar del sol de una manera sana, saludable y responsable.
Un beso y que paséis un excelente fin de semana.