Ayer no termina nunca

En el año 2017, en una España hundida por la crisis, una pareja se reencuentra en Barcelona tras cinco años sin verse. Se habían separado después de haber perdido a su hijo.

 Ese reencuentro será muy intenso. Se repasará todo el dolor, las preguntas sin respuesta. Con un par de actores protagonistas que se dejan la piel; sin embargo algunos detalles chirrían. No entiendo los motivos de las contorsiones de Candela Peña, ni la necesidad de algunos gestos excesivos. A destacar ese incesante diálogo que penetra más allá de los recuerdos y el presente dañado. Tampoco me convencen las alusiones a la crisis económica y la inmigración a Alemania en un futuro cercano.

Promesas: lucharé por ti, pase lo que pase, lucharé por ti. Para ella, el momento más feliz de su vida. Para él….
Nunca has dependido de mí.

Cosas esenciales que se nos olvidan.Hacer cosas que uno en realidad no quiere.

No tengo ningún sueño.
Borrarlo todo y volver a empezar. ¿Pero cómo elegir el punto exacto de corte?
Adicta al sufrimiento.

¿Qué ves cuándo me miras?
Darle un sitio al olvido.
La gente huye del dolor de los otros, no saben qué hacer, no saben cómo comportarse, los amigos desaparecen, y, a ti, en el fondo, te da igual….

Directora y guiónIsabel Coixet. Música Alfonso Vilallonga. Fotografía Jordi Azategui. RepartoJavier Cámara, Candela Peña. España 2013, 95 min. Premios Festival de Málaga: 4 premios, incluyendo mejor actriz (Candela Peña)