Lás prácticas en los departamentos de IT siguen evolucionando a la vez que novedosos desarrollos van introduciéndose en las empresas. Mantenerse actualizado con esas nuevas tendencias es un punto importante para las empresas, ya que la complacencia tecnológica puede llevarnos a quedarnos fuera de la foto. A perder relevancia en el mercado, o -peor aún- a un fracaso como empresa en forma de bancarrota.
El mejor ejemplo de esta consecuencia negativa lo podemos ver con la caída de Blockbuster, la franquicia de alquiler de películas de vídeo, líder en Estados Unidos y que perdió una importante cuota de mercado por la complecencia tecnológica a la hora de mantenerse actualizados con las nuevas tecnologías.
Las compañías de IT en particular necesitan asegurarse que su operativa está lo más actualizada, y eso casi siempre empieza por la involucración de sus empleados, que han de ser conscientes y mantenerse formados en los nuevos desarrollos de aquellas áreas de las que son responsables o en las que trabajan.
¿Por qué es necesario?
Todas las operaciones en el área de IT comienzan con los empleados de IT. Si una aplicación específica no funciona o un sistema no parece ser tan eficiente como debería, el primer lugar al que miran muchos manager es el proceso llevado a cabo por sus empleados. La entrada de datos es -en la mayoría de las veces- el error más común en un fallo de una aplicación o sistema, y esto explica por qué muchas compañías gastan importantes cantidades de dinero para asegurarse que sus trabajadores tienen los conocimientos específicos sobre el sistema que manejan.
Como las empresas implementan constantes desarrollos y nuevos sistemas basados en tecnologías punteras y en los últimos standards, es necesario asegurarse que los equipos de IT conocen los límites y las capacidades del nuevo sistema que se está implantando y se mantienen formados constantemente, ya que seguramente lo que hoy estén manejado no fue transmitido durante su proceso formativo, ya sea durante su periodo universitario o gracias a su experiencia laboral.
La formación in-house
Uno de los métodos de formación para los departamentos de IT es utilizar las videoconferencias para realizar formaciones, y usan servicios como Blue Jeans para ello. Muchas empresas tienen sedes en muchísimas ciudades, y sería realmente costoso desarrollar formaciones presenciales a todos y cada uno de ellos, o -más dificil todavía- conseguir juntar a todos en un único sitio para llevar a cabo la formación. Usar video conferencias como herramientas de formación es considerado como una de las mejores formas para conectar trabajadores de diferentes sedes, pues permite mantenerles a todos conectados a la vez independientemente del lugar en el que se encuentren. Además rebaja significativamente el coste de viaje y alojamiento y hará que los empleados de departamentos como IT (y cualquier otro) estén más dispuestos a acudir a las formaciones.
Formación incentivada
Otra forma de conseguir que el personal de IT siga siendo relevante en la organización es ofreciéndoles formación adicional. Esto puede hacerse ofreciéndoles incentivos económicos por seguir desarrollándose en alguna universidad, y los empleados suelen valorar positivamente este tipo de incentivos, ya que les permite seguir formándose a la vez que son premiados económicamente por ello mientras les convierten en profesionales mejor formados que sean más valorados en el mercado. Muchas empresas realizan este tipo de formación para sus empleados de mayor potencial, y esto se está convirtiendo en algo cada vez más popular entre las empresas así como entre trabajadores de IT.
Pagar a tus empleados por acudir a conferencias y congresos de IT
Los congresos de IT, como puede ser el CES (Consumer Electronics Show) son buenas ocasiones donde la gente de IT puede comprobar de primera mano los nuevos desarrollos que luego aplicarán en la operativa de las empresas. Aunque si estás leyendo esto supongo que sabrás igual que yo que no es muy habitual acudir a este tipo de eventos principalmente porque no somos del todo dueños de nuestras agendas y nuestros compromisos profesionales nos lo impiden, pero en cierto modo las empresas han de darse cuenta de que estos eventos son perfectos para que se conozcan las nuevas tecnologías y como aprovecharse de ellas en la empresa.
Traer expertos de fuera
Normalmente las empresas acaban confiando en los consultores cuando el conocimiento de un experto es necesario o cuando ha de evaluarse la vialibilidad de un proceso recién implantado, o sobre la capacidad de los empleados involucrados. Los consultores son expertos en sus áreas de actividad porque precisamente su trabajo consiste en conocer las tendencias y cómo estas pueden ser relevantes para las empresas.
Trayéndote a consultores puedes determinar si tus empleados necesitan formación adicional. De hecho, los consultores también pueden determinar si tus procesos de IT son adecuados y están alineados con los estándares del mercado y con las best practices. Suele ser una buena forma de asegurar eficiencia y eficacia operacional.
Todos estos métodos tienen una cosa en común. Necesitan la involucración de la empresa para llevarlos a cabo. Las empresas no pueden esperar que sus empleados paguen su propia formación y vayan a estos congresos por su propia cuenta. Una participación activa y el apoyo de la empresa es una absoluta necesidad. Sin este nivel de soporte es probable que una compañía acabe echando en falta el personal cualificado capaz de distinguir cuando es imprescindible implementar un desarrollo tecnoógico y la forma de llevarlo a cabo