Yo no soy la persona más paciente del mundo, la verdad, pero sí es cierto que desde que soy madre flipoencolores conmigo misma. Es algo de lo que estoy bastante orgullosa, porque tengo una nueva capacidad inexistente antes: de repente, soy paciente. Tengo una capacidad de aguante que va oscilando y variando de nivel según las circunstancias. De mucha a casi ninguna. Y no necesariamente tiene que seguir un orden lógico. Me explico: no es que pierda la paciencia por cosas tremendas, no. Quizá un día aguanto estoicamente mediando entre los tres en discusiones que se alargan horas (porque alguno de los tres se encarga de fastidiar cada poco, alternándose),como que a los dos minutos de la primera queja ya no puedo más. ¿Lógica? Ninguna, ya véis.
Pero el resultado de todo esto es que hay ocasiones en las que no puedo más. Me caigo mal. No me soporto. Soy insoportable.
- Soy insoportable cuando me oigo 20 veces seguidas decir "recogeesoporfavor, ya te lo he dicho 19 veces"
- Soy insoportable cuando tengo que decir "no". Otra vez.- Soy insoportable cuando me doy cuenta de que he metido la pata en algo relacionado con ellos. Que lo he hecho mal.- Soy insoportable cuando me flagelo por lo anterior (sí, he aquí una experta)- Soy insoportable cuando no aguanto más y les pego un grito (rinonaranjarinonaranja....es mi mantra)- Soy insoportable cuando no he dormido lo suficiente.- Soy insoportable cuando algo no lo tengo claro. Tengo que insistir e insistir hasta que queda cristalino.
Pero sobre todo y más que nada, se me ha puesto un tono de voz de pito insoportable. Es lo que más me fastidia, me oigo, y no me soporto. Me recuerdo a......¿una madre? ¡Oh, no! ¡horror!