Revista Infancia
Desde hace años, en mis charlas a los padres, les explico que los peores artilugios que han aparecido para iniciar a los bebés en la alimentación complementaria han sido la batidora, el turmix, el minipimer y el babycook entre otros muchos . Nuestras abuelas y madres sólo disponían para ablandar la comida del tenedor o, como mucho, el pasapurés y en los países subdesarrollados o en tribus sin corriente eléctrica todavía los usan (o las manos). Al entrar en la revolución industrial todo cambió incluyendo la forma de dar de comer a los niños. Ahora, en la Era del Conocimiento, nos gusta volver a lo anterior. dietas paleolíticas, ciudades lentas, meditación sin claustros, etc.
Ahora se ha puesto de moda este método alternativo a la cuchara que hasta sesudas autoridades pediatricas lo recomiendan. ¡Hemos descubierto la pólvora para alimentar a los niños! ¡No sabíamos que tienen manos, que saben coger cosas y llevárselas a la boca! . Qué barbaridad, que tontos hemos sido los pediatras. Cuando esta moda cristalice del todo veremos si, como en todo, se han resuelto algunas dudas que plantea este "nuevo método" en cuanto al tipo, momento y calidad de alimentos a introducir.
Lástima que a los adultos no nos dejen comer con los dedos con lo que se disfruta haciéndolo.