Bacteria neumococo: Qué es y cómo puedes proteger a tu bebé

Este post es parte de una campaña de orientación y prevención sobre las enfermedades neumocócicas. Las opiniones son mías. 
¿Sabías que los niños menores de 2 años están entre los que tienen mayor riesgo de contraer enfermedades neumocócicas? Se trata de afecciones causadas por bacterias llamadas neumococos. 
El Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés, menciona  en su portal que, "estas enfermedades pueden provocar discapacidades como sordera, daño cerebral o la pérdida de los brazos o las piernas". Igual resalta la importancia de prevenir ya que, "alrededor de 1 de cada 15 niños que contraen meningitis neucocócica muere como consecuencia de esta enfermedad". 

¿Cómo se propaga la bacteria?

Basta con que una persona infectada tosa o estornude cerca de nuestros pequeños para que estos se puedan contagiar. Y ojo, quizás tu pequeño no presente síntomas, pero puede que tengan la bacteria en su nariz o garganta y cuando ellos tosen o estornudan pueden estar contagiando a otros niños.

¿Cuáles son los síntomas más comunes?

Presta atención. El CDC menciona que son fiebre y escalofríos, tos, dolor de pecho y respiración profunda o rápida (dificultad para respirar). En una entrevista que compartí en este espacio hace unos meses, la pediatra Dra. Glory Serrano señaló que esta enfermedad "puede causar infección de oído, infección de garganta, sinusitis, pulmonía y meningitis". "En los bebés, la meningitis puede causar falta de apetito y pocas ganas de tomar líquidos, estado de alerta bajo y vómitos", según el CDC.

¿Cómo puedo prevenir las enfermedades neumocócicas?

Los especialistas aseguran que la mejor manera de proteger a la familia contra las enfermedades neumocócicas es con la vacuna antineumocócica. De hecho, en el calendario de vacunación de Puerto Rico incluyen 4 dosis que son suministradas al bebé entre los dos y 18 meses de nacido. Recuerda consultar con el pediatra.
Nota: Este post es para propósitos de orientación. NO sustituyen las recomendaciones u opiniones de un profesional de la salud.