La compañía Malaysia Airlines, tras las presión de los internautas, se ha visto obligada a retirar uno de sus tweets publicitarios con un slogan bastante inapropiado que había generado un bad buzz digital.
La aerolínea ha sufrido una importante caída en sus reservas desde las dos últimas tragedias aéreas en las que se vieron implicados aeronaves suyas durante este año: la desaparición en marzo del vol MH370 (239 pasajeros), aún sin aclarar y la explosión en vuelo en julio de este mismo año de otro Boeing de Malaysia Airlines, en Ucrania, debido a un misil (298 pasajeros).
Para mejorar su imagen y su facturación, Malaysia Airlines empezó a lanzar tarifas especiales, nuevas campañas publicitarias y juegos en los que se podía ganar billetes gratuitos. Pero en dos casos, las acciones publicitarias no fueron muy acertadas.
“¿Quieres ir a algún sitio pero no sabes dónde?. Con este tweet publicado el pasado jueves, Malaysia Airlines quería promocionar sus ofertas de fin de año. Pero muchos internautas lo consideraron una provocación tras las dos últimas catástrofes aéreas.
Malaysia Airlines se vio obligada a justificarse tras haber suprimido dicho tweet. Según la compañía, este mensaje buscaba “animar a los viajeros a explorar nuevas ofertas y destinos durante el periodo vacacional”. La empresa “se disculpa por haber ofendido a algunas personas” precisando que el mensaje ha sido suprimido.
El caso de la semana pasada, no es el único. Ya en septiembre de este mismo año, la compañía volvió a meter la pata proponiendo a los australianos y neozelandeses el elaborar una “Ultimate Bucket list” (una lista de ultimas cosas a hacer).
Una traducción mal elegida
En la campaña de septiembre, Malaysia Airlines proponía a los participantes el explicar en 500 palabras como máximo lo que les gustaría añadir a su “lista de cosas a hacer” e indicar donde les gustaría realizarlas (“What and where would you like to tick off on your bucket list?”).
El problema, es que la frase “ultimate bucket list” tiene una significación mucho más fuerte, lo que seguramente ignoraba la compañía aerea. En ingles, tiene el sentido de “lista de cosas a hacer antes de morir”. Lo que para una compañía que recientemente había sufridos dos catástrofes aéreas era bastante inapropiado.