"Bajo terapia". Autor: Matías del Federico. Director: Daniel Veronese
Asunto.- Una comedia en la que tres parejas que habitualmente asisten a la consulta de la psicóloga Antonia son convocadas juntas una tarde-noche de un viernes, sin ellas saberlo, a una original y sorpresiva sesión en la que harán terapia sin terapeuta, es decir, sin Antonia. Tras la sorpresa inicial las tres parejas, unas más reticentes que otras al experimento, comienzan a desarrollar las siete "tareas terapéuticas" que la psicóloga les ha dejado escritas. Al irlas realizando deberán mostrarse tal y como son a sus compañeros a fin de poder dar salida a sus traumas y conflictos emocionales. Esta salida se realiza en un ambiente de gran comicidad ante el contraste ofrecido al público de tres tipos de pareja: una liberal, una más común y otra más tradicional. Los seis integrantes esconden algo, pero no todo es de la misma gravedad. Durante la sesión irán mostrando sus secretos pero no todos tienen el deseo de mostrarlos.Si hay algo que acá asociamos con la Argentina ello es la terapia psicológica, algo muy unido a la habitual verborragia característica de sus naturales. Por ello se podría afirmar la absoluta argentinidad de la obra.
Lo anterior se patentiza en unos textos muy ágiles llenos de un humor diáfano que llega al público con toda su fuerza merced al empleo del lenguaje y vocabulario habituales entre los espectadores. No hay un salto entre la escena y el patio de butacas, todos nos sentimos identificados con la problemática que se desarrolla en las tablas. Es una obra en la que la risa está garantizada. pero no es una obra tonta en la que pasada la hora y media de su duración se sale a la calle y se olvida todo lo que allí se ha visto. No, es una obra con mucho fondo en la que se plantean conflictos que no por comunes y escuchados por todos dejan de tener importancia: la educación de los hijos, la vida en pareja, los celos, la anulación del otro, las adicciones, el sexo, el trabajo...
Propósito.- Matías del Federico busca conseguir con su comedia la catarsis, primigenia función del teatro griego. Y la consigue por partida doble gracias a la habilidad con la que maneja el artilugio teatral, -fundamentalmente los diálogos (estamos ante un teatro de texto)- que hace que la misma acontezca sobre la escena y con seguridad en muchos de los asistentes. Estamos, y esto en mi opinión es uno de los méritos de la obra, ante el teatro dentro del teatro.
Una escena con poco mobiliario y mucha funcionalidad
La obra y su puesta en escena me ha recordado, desde el principio, a "El método Grönholm" de Jordi Galcerán, obra que el mismo Veronese dirigió con éxito en Buenos Aires el año 2006. Como en aquella estamos ante una reunión de personas que no se conocen y que han de solventar unas pruebas o realizar unas tareas que las llevarán a mostrarse tal y como son. La diferencia radica en el motivo que impulsa cada una de las representaciones: en la de Galcerán se compite por conseguir un puesto de trabajo, y en la de Del Federico es la necesidad de encontrar la paz y felicidad en la pareja la que pone en marcha la acción. Mucha psicología en ambas.Los actores son la mayoría muy conocidos por el público. Las tres parejas están formadas por Gorka Otxoa -"Velvet" , "Águila roja"- como Esteban y Manuela Velasco -"Velvet"- como Carla; Fele Martínez -"Los abrazos rotos"- como Daniel y Melani Olivares -"Aída"- como Laura; y por último Juan Carlos Vellido como Roberto y Carmen Ruiz como Marta. Todos ellos sacan adelante su papel con eficiencia sin percibirse diferencias importantes entre unos y otros. A mí en particular me ha gustado mucho Melani Olivares pues, pese a no ser para nada admirador de la serie televisiva de "Aida" por su papel en la misma la tenía mentalmente encasillada en ese tipo de personajes chuscos, con lo que su actuación aquí me ha sorprendido satisfactoriamente.
Conclusión.- En definitiva una obra que habla de, en palabras de su director, "lo solo que se está en pareja, y de lo que uno llega a permitir para no estar solo" algo en lo que, -dice-, "mucha gente puede reconocerse a sí misma o a personas muy cercanas" y por eso es fácil que se rían.
Recomendación: Obra muy, pero que muy, recomendable. De lo mejor que ahora mismo se puede ver en Madrid. Hay que darse prisa para verla pues estará en cartel sólo hasta el próximo día 27 de septiembre.